Rozada ya está al mando
“El entrenador nos pide intensidad y mentalidad ganadora”, asegura Champagne sobre el nuevo técnico.
El cambio de rumbo se anunció minutos después de la derrota ante el Elche y la escenificación, al día siguiente en El Requexón. Egea se despidió de los futbolistas en el vestuario y Javi Rozada, 37 años y que las dos últimas temporadas ha dirigido al filial del Oviedo, se puso manos a la obra en el césped de El Requexón. Su primera sesión mostró su carácter: un entrenamiento intenso, con el entrenador en primera línea arengando a sus pupilos. El Oviedo necesita reaccionar cuanto antes y el calendario le ofrece una nueva oportunidad este jueves, con el duelo ante el Extremadura en el Carlos Tartiere.
El club ha anunciado a Rozada como técnico sin especificar por cuánto tiempo estará al frente. No se sabe aún si el entrenador llega como solución provisional o afrontará el reto esta campaña de sacar a los azules de los puestos de peligro en la clasificación. Pero sus intenciones han quedado claras desde el primer día. “Rozada nos pide intensidad y mentalidad ganadora. Nos ha dicho que cree en esta plantilla”, reveló Champagne, uno de los veteranos, al término de la sesión inicial del entrenador asturiano. “Estamos en un club grande y no todos pueden ponerse esta camiseta. Cuando uno juega en una entidad grande sabe que está sometido a más presión. Debemos afrontar esta situación como hombres”, añadió el argentino.
De cara al primer test en el Tartiere, Egea deberá retocar su once. Cuenta el ovetense con las ausencias de Tejera y Obeng, ambos expulsados ante el Elche, pero parece que puede recuperar a Saúl Berjón, que fue baja el domingo por un proceso vírico. El entrenador buscará en sesiones a puerta cerrada el clima de tranquilidad idóneo para preparar un choque que, a pesar de que la competición no haya hecho más que empezar, se considera decisivo para navegar un clima de tranquilidad.
Egea: “El equipo irá hacia arriba”
Antes de que Javi Rozada se estrenara sobre el césped de El Requexón, Sergio Egea se despedía de los que hasta el domingo habían sido sus pupilos en la intimidad del vestuario. El técnico, elegante como siempre, se va sin hacer ruido y sin querer buscar culpables. “No quiero darle muchas vueltas. Solo quería decir que estoy agradecido a la afición porque me han tratado de una forma fenomenal. Les deseo lo mejor a todos. Los futbolistas son grandes profesionales y el entrenador siempre es prisionero de los resultado. Espero lo mejor para el Oviedo. que irá hacia arriba, y para la afición”. La segunda etapa de Egea al frente del club azul se cierra con un punto sumado sobre 15 y con el equipo instalado en la última plaza de la clasificación. Rozada tiene trabajo por delante para tratar de que la situación no se siga complicando.