Acabó el show de Neymar, pero todavía quedan las preguntas
Se cumplió el plazo y Neymar se queda en el PSG después de dos meses. Ahora falta ver si el culebrón vivirá una nueva temporada el próximo verano.
Cerró el mercado y Neymar se quedó en París montando con el PSG una campaña de limpieza de imagen que le permita recuperar el cariño de los seguidores por lo menos durante este curso antes de que se vea si con el tiempo vuelve a acometer un intento de fuga cuando en julio cueste 170 millones. Por su parte, el Barcelona se queda lamiéndose las heridas de una negociación con la boca pequeña y que ha dejado el prestigio de la entidad por los suelos después de haberse arrastrado para tratar de volver a contratar a un jugador que le dejó tirado engañándola hasta el último minuto tras renovar y que cuando se marchó denunció al club.
La directiva del Barcelona se reunió ayer en la primera junta ordinaria tras el verano. Una ocasión pintiparada para salir al final de la reunión y dar los detalles de muchas preguntas que quedan en el aire en una negociación que desde el inicio tuvo aroma de cartón piedra y que únicamente se creyó Neymar. Cada vez parece que se orquestó más para satisfacer a una parte del vestuario más que para traer de regreso al brasileño. La primera temporada del culebrón se ha terminado, pero quedan muchas respuestas pendientes. Ayer, el Barça no consideró que fuera el día de darlas.
Se amontonan las preguntas respecto a este caso. La primera sería saber ¿quién diantre pidió el fichaje? ¿El entrenador? ¿La secretaría técnica? ¿Los compañeros? ¿La directiva?. Tras la contratación de Griezmann nadie ha dado una sola razón futbolística para acometer la operación. Raro.
Tan extraño como que ante un fichaje de esta magnitud, no se haga una propuesta escrita hasta el 27 de agosto, a una semana de cerrar el mercado. Igualmente, se debería responder a la pregunta de ¿por qué si era un fichaje tan estratégico, el presidente Bartomeu no participó presencialmente en ninguna negociación? ¿Y por qué se retransmitieron todos los movimientos? ¿Quizás se estaba enviando un mensaje a alguien demostrando que había interés?
Tampoco estaría de más que la junta del Barcelona saliera un día a la palestra a explicar cómo iba a financiarse una operación que suponía un desembolso inasumible para un club que tuvo que pedir un préstamo para pagar la cláusula de Griezmann. Y si la idea era utilizar a jugadores como moneda de cambio ¿por qué se permitió a Coutinho fichar por el Bayern en plena negociación? ¿O es que aún no había negociación? Otro de los nombres que se usaron fue Dembélé. ¿Por qué se le dijo que era básico para el proyecto de este curso e incluso que era mejor que Neymar y luego le quisieron canjear?
Y por último, Neymar, que parece que es el que se creyó que iba en serio, debería responder a dos preguntas: ¿por qué no hizo el gesto público definitivo? Y, sobre todo, ¿por qué no retiró la demanda?