Los diez motivos por los que Neymar todavía no ha vuelto al Barça
La debilidad financiera del club blaugrana, la ausencia de un gesto definitivo por parte del jugador y la urgencia contra el crono, principales factores.
Faltan cuatro días para que cierre el mercado. Barça, París Saint-Germain y Neymar siguen más o menos donde estaban hace cuatro meses. Si bien entonces todo el mundo disimulaba lo que era una negociación flagrante, ahora, ya con las cartas boca arriba, el tiempo apremia ante una operación que ya va contrarreloj. Estos son los principales motivos por los que no se ha cerrado.
1. Falta el gesto definitivo.
El Barcelona sigue esperando por parte de Neymar ese acto de rebeldía que lleve al PSG a un callejón sin salida. Da la impresión que durante semanas la prioridad del jugador era salir de París por encima de ir al Barça. Nunca se cerró otras puertas. Si hizo el gesto, fue de puertas adentro o por personas interpuestas.
2. Falta músculo financiero.
El club blaugrana ha ido de compras a la tienda más cara del mundo planteando la venta como un trueque. El club catalán ya tuvo que pedir un préstamo y vender mediante el “financing” sus deudas para ingresar los 120 millones de la cláusula de Griezmann, mientras que para fichar a Malcom tuvo que esperar a cerrar el traspaso de Malcom. A Cillessen se le intercambió por Neto en una operación financiera. El PSG desde el principio pidió dinero al contado y el Barça no lo tenía.
3. Falta sintonía entre los clubes.
Barça y PSG han construido a lo largo de los últimos años una relación que Le Parisien definía en su edición del viernes como de “íntima enemistad”. En los últimos años, el Barça ha puesto cerco, sin éxito, a Thiago Silva, Marquinhos, Verratti, Di María, Rabiot y Neymar, que dejó plantado al club culé para ir a París. El Barça le levantó al PSG a De Jong cuando casi lo tenía hecho y éstos respondieron fichando al cadete Xavi Simons. La forma abrupta en la que terminó la relación entre Qatar y el Barça en el terreno de patrocinio tampoco ayuda. El emirato invirtió mucho en el Barça de Rosell y se sintió insultado.
4.Falta colaboración de jugadores.
Una de las fórmulas propuestas por el Barcelona para acometer la operación ante la falta de liquidez era la de incluir jugadores como moneda de cambio, pero casi ninguno ha querido colaborar. Coutinho se fue al Bayern y no quiso esperar, Dembélé no quiere irse y el resto se enteran por la prensa de que están siendo objeto de negociación.
5. Falta tiempo.
Por mucho que los protagonistas negaran la realidad, lo cierto es que desde la primavera pasada se estaba planeando la operación. No obstante, nadie dio un paso decisivo al frente y se optó por disimular hasta el momento en el que era imposible esconder al elefante en el pasillo. Ahora estamos a cuatro días de que cierre el mercado. Poco tiempo por delante y mucha gente a la que poner de acuerdo.
6. Falta intimidad.
El Barça ha retransmitido las negociaciones casi en directo desde el momento en el que admitió que había caso Neymar. Esta ostentación de actividad va en contra de cualquier manual de política deportiva. Cuando el PSG se llevó a Neymar, el movimiento pilló por sorpresa a todo el mundo. El Barça, allá donde ha ido ha tenido a cámaras esperándole.
7. Falta unanimidad social.
El retorno de Neymar, como todo lo que afecta al Barça, tiene tantos detractores como seguidores. Unos parten de la idea de que una persona que se fue como se fue y que mantiene denunciado al Barça no puede volver por una cuestión de dignidad. Los segundos sólo valoran su calidad futbolística ante el fiasco de los que debían ser sus sustitutos. Este debate existe en la masa social, pero también en la junta. En el vestuario, no. Ahí todos están de acuerdo en que regrese.
8. Falta liderazgo.
Queda claro que es Bartomeu el primer interesado en el retorno de Neymar. Pero el presidente es prisionero de sus palabras recientes. Aseguró por dos veces hace menos de tres meses que Dembélé es mejor que el brasileño y ahora le ofrece como trueque y tardó en aceptar que iba a por Neymar. De momento, jamás ha dado la cara como negociador y ha delegado en Javier Bordas o en sus ejecutivos.
9. Falta de proyecto deportivo.
Nadie sabe muy bien a qué obedece la urgencia de ir a por Neymar después de fichar a Griezmann en lo que a proyecto deportivo respecta. Ni Valverde, el técnico, ni Éric Abidal, secretario técnico, han explicado las razones estratégicas de esta ofensiva que desmonta de un plumazo una idea basada en Coutinho y Dembélé que suponía la inversión más alta de la historia de la entidad.
10. Falta de sinceridad.
En esta película da la sensación de que nadie se acaba de fiar de nadie. Acabe como acabe, la historia está llena de sospechas. Desde el PSG creen que el Barça jamás ha ido en serio a por el jugador, desde el Barça aseguran que los franceses en realidad no quieren venderlo y los futbolistas del Barça exigen más brío a su directiva. Neymar, mientras tanto, se entrena y toma el sol.