La 'operación salida' en el Levante está atascada
El club necesita colocar a los descartes para terminar de perfilar el nuevo proyecto. Tres hombres son claves: Luna, Sadiku y Prcic.
EI Levante afronta la última semana de mercado con dificultades para acometer la operación salida. Con el Fair Play Financiero acechando las últimas operaciones granotas, motivo por el que Nemanja Radoja todavía no ha sido inscrito en LaLiga, dar marcha a los descartes se antoja fundamental para acabar de perfilar el proyecto 2019-20.
En ese sentido, hay tres nombres que destacan por encima del resto: Antonio Luna, Sanjin Prcic y Armando Sadiku. Por los que se han recibido intereses, pero no ofertas en firme. Ellos tienen la llave, especialmente Luna y Prcic, para desbloquear la situación por sus importantes salarios (superiores al millón de euros brutos). Ahí reside el principal escollo para colocarlos. El conjunto de Orriols, incluso, valora abonar parte de sus fichas para agilizar la gestión. Pero no será tarea fácil.
Por el lateral izquierdo han preguntado varios equipos de España, ya que el jugador ha acotado su salida a un equipo nacional por motivos personales. La relación del zaguero sevillano con Paco López es nula e incluso valora permanecer un año en la plantilla pese a no contar con posibilidades de entrar en el equipo. Todavía le restan dos años de contrato con unos emolumentos importantes y asume que podría pasar un año en la grada. El Granada es el equipo que más fuerte se mantiene en la puja, pero no hay una operación en marcha.
Situación parecida la del centrocampista bosnio. Con el once titular lejano y sin la simpatía de Paco López, Prcic marchó a Francia, cedido en las filas del Estrasburgo, para no estancar su carrera en la ventana de invierno. Pese al buen medio año en el país vecino, donde nació, con título de Copa incluido, no hay propuestas que satisfagan a ambas partes. El Zaragoza, que ha entablado relaciones con la entidad levantinista este verano con el traspaso de Dwamena, se ha interesado en incorporarlo. Él, de momento, no contempla jugar en Segunda División.
Mientras que Sadiku, con tan sólo un año más de vinculación con el conjunto granota, busca una solución definitiva para su futuro tras regresar de su cesión en el Lugano y verse sin hueco en la plantilla.
Y, además, están los casos de Cheick Doukouré, Iván López o Fran Manzanara. El marfileño, ya recuperado de su grave lesión de rodilla, ultima su vuelta a los terrenos de juego, pero no acaba de contar y es una situación delicada. Iván podría quedarse en plantilla y por Manzanara no han llegado ofertas para que siga su progresión en una categoría superior. El atasco es manifiesto en la operación salida granota.
Oier tiene la decisión para desbloquear la portería
Oier Olazábal tiene en sus manos la posibilidad de desbloquear el cambio de cromos en portería con el Girona, que traería a Bono a Orriols y llevaría al portero granota a Montilivi. La decisión está en el tejado del guardameta irundarra, al que le restan dos años de contrato más uno opcional como levantinista. De darse, el vasco querría que se respetasen sus garantías contractuales en su nuevo destino, desestimando una cesión pura y dura. Si no hay opción de compra obligatoria en caso de ascenso, Oier, que cuenta con el aval de Unzué, que lo llevó al Barcelona con 17 años, no se mueve. Ambos clubes trabajan en la fórmula para cuajar la operación. El Levante tan sólo contempla la llegada del marroquí para reforzar su portería esta temporada.