El eterno protagonismo de David García
Condenado al ostracismo por la errática política deportiva de la UD, el eterno capitán tendrá su reconocimiento en el Estadio de Gran Canaria.
Discreto fuera del césped y aguerrido sobre él. Así fue siempre David García, negándose a sus 37 años a la retirada forzosa a la que le quería someter quien tanto obtuvo de él, 474 partidos, más que nadie en la historia de la Unión Deportiva Las Palmas.
Anda estos días el zaguera grancanario ejercitándose con el San Fernando para no perder una forma física incuestionable. Cuando recibió la llamada que le ofreció seguir en Las Palmas pero como segundo entrenador de Juan Manuel Rodríguez en el filial, supo David que sus días como futbolista de élite en Gran Canaria llegaron a su fin. Con la tozudez propia de haberse labrado una reputación impoluta, incluso durante la temporada anunció que, aunque Las Palmas no le renovara, él quería seguir jugando. Y en esas está.
Mientras tanto, la afición amarilla se está movilizando para darle lo que entienden como un merecido homenaje, ese que no ha llegado por parte del club, que solo a petición popular le dio su nombre a uno de los campos de la nueva Ciudad Deportiva. Así, se avecina una sonora ovación en su favor este domingo en el minuto 5.
Excusas
Las Palmas se excusó en una supuesta falta de sitio con aromas de problemas salariales. El club se hizo un lío. Pero los criterios deportivos hablaron por sí solos. No era solo cuestión de dinero. De los 6 centrales que tuvo Las Palmas el curso pasado, solo Cala intervino más que él. El sevillano se marchó al Cádiz y García continúa buscando acomodo. Curioso caso el de Las Palmas, en el que su eterno capitán, que nunca dejó de cumplir, siempre acabó jugando por mucha competencia que tuviera.
