Alfonso García se despide soñando con un Almería en Europa
El ya expresidente de la UDA espera que "el club vuelva otra vez a Primera y por qué no meternos en Europa". Mohamed El Assy promete "un gran proyecto para los próximos tres años".
Dieciséis años después Alfonso García es historia de la Unión Deportiva Almería. Hace cinco días vendió todas sus acciones (el 96% del total de la entidad) a Turki Al-Sheikh de manera repentina y hoy se ha despedido en una sala de prensa del Estadio de los Juegos Mediterráneos en la que no cabía un alfiler, con sus consejeros y aficionados presentes.
"Bienvenidos a esta rueda de prensa con motivo de la venta del club a los nuevos propietarios. Aquí está con nosotros Mohamed [El Assy], el nuevo director general de la Unión Deportiva Almería. Le voy a pasar ahora la palabra, pero como ya dije en su día, yo lo que quiero es lo mejor para el club, así que pueden contar conmigo en lo que necesite y yo pueda aportar", comentaba el ya expresidente de la UDA.
"Quiero lo mejor para la Unión Deportiva Almería, que siga funcionando y que cada vez sea más importante. La idea es un inversor que le guste el fútbol y que tenga la capacidad económica que requieren los nuevos tiempos del fútbol", proseguía antes de que tomase la palabra el nuevo director general, Mohamed El Assy.
La que será la cara visible en Almería de Al-Sheikh se presentó de manera breve. "Me siento agradecido de estar en el club y en Almería. Es una ciudad preciosa y estamos muy agradecidos el nuevo propietario y yo de la reacción en las calles con los aficionados y la atmósfera que hay estos días en la ciudad. Os prometemos un gran proyecto, muy ambicioso, para los próximos tres años", comentaba El Assy, que explicará el nuevo proyecto en los próximos días.
Posteriormente volvió a hablar Alfonso García (sin ninguna chuleta), antes de contestar a once preguntas:
"Son casi 17 años y quiero darle las gracias a mi junta directiva. Congeniamos desde el primer momento. Hemos pasado momentos muy buenos y el objetivo principal siempre se ha cumplido: estar en la LFP. Te da alas para estar en el mundo profesional del fútbol a nivel del mundial, con opciones de estar en Primera, como así ha ocurrido. Quiero despedirme de todo el mundo. Uno ha tenido sus aciertos y sus errores. En el mundo del fútbol la posesión de la verdad no la tiene nadie porque influyen muchas cosas alrededor de un balón tan pequeñito y a la vez tan grande. Es imposible contemplar todas las variables que hay en un partido y en una temporada. El que hace lo que sabe y lo que puede no se puede ir mal. Desde fuera uno puede decir que no se gasta, pero uno sabe realmente sus posibilidades. Yo no guardo rencor hacia nada ni hacia nadie. Llegan nuevos tiempos. Quería pasar el testigo a alguien con una capacidad superior a la mía. Siempre he dicho que venderé el club a personas que puedan y quieran. Querer ha habido, cientos, todas las semanas llegaba uno, pero lo analizábamos y no tenían la capacidad. Voy a ser el fan uno de los números unos del Almería porque lo he vivido intensamente. La Ciudad Deportiva ha sido mi asignatura pendiente, pero los nuevos propietarios me han dicho que la harán. Ellos pueden y lo van a hacer. A mí no me ha llegado el momento: en un principio no teníamos los terrenos y luego sí, pero no la capacidad económica. Estoy entusiasmado con el proyecto de estos señores, es lo que quería y es importante que la afición ayude. Viene de un país muy diferente. No van a hacer cosas por hacerlas, sino porque son sus costumbres. Ellos vienen a apostar por este club y por esta ciudad. Yo llevo en la sangre la Unión Deportiva Almería y el color rojiblanco lo seguiré llevando siempre. Muchísimas gracias a los que me han apoyado y a los que no me han apoyado. Al final esto es fútbol y yo no voy a guardar rencor a nada ni a nadie. Ahora somos todos amigos por el simple hecho de que nos gusta el fútbol, con el sufrimiento que ello supone. Aquí hay un almeriense más".
- ¿Cuándo comenzaron las negociaciones?
La semana pasada. Al final, esto es como todo, el que quiera y pueda si quiere y le da velocidad, ahí está el comprador. Otros vinieron y marearon la perdiz. Dan vueltas para ver si pillan una coyuntura, pillan las acciones... No, no, aquí hay que hacer las cosas bien. ¿Tienes la capacidad? Sí. Demuéstramelo. Ha llegado el momento y ojalá que no me equivoque: deseo que el equipo suba a Primera. Quiero que siga creciendo.
- ¿Son los nuevos propietarios aquellos compradores que idealizaba en una futura venta?
La noche en la que hice una videoconferencia con Turki pregunté, con el intérprete, los objetivos que tenía. Y me dijo que quería hacer un equipo grande siempre que se lo permitan, así como que la gente tiene que apoyar, no en lo económico, sino en facilidades porque si no es imposible. Me dijo que si eso se da, por su parte están las ganas, la voluntad y el dinero. Es lo que estamos buscando. En los últimos cinco años ha habido cien compradores diferentes, pero cuando analizas y ves que quieren cobrar cuatro o cinco millones y dejar el club estancando... Por eso no cerré operaciones antes.
- ¿Cuál ha sido su momento más feliz?
Desde que llegué aquí siempre me marqué que el club estuviese en Liga de Fútbol Profesional. Aunque se ha subido a Primera, todos los años en los que manteníamos la categoría en LFP esa noche lo celebraba. No se le da importancia, pero si echamos la vista atrás, vemos muchos equipos que han estado en Primera o Segunda y ahora están en Segunda B, Tercera o desaparecidos. Lo importante es mantener la categoría aunque sea en la última jornada y sufriendo. Tal vez no se le ha dado la importancia, pero yo sí porque sé de la dificultad que lleva. Los años que hemos ascendido lo he celebrado, pero los de la permanencia también.
- ¿Y el peor?
Como he dicho antes, en el fútbol nadie tiene la posesión de la verdad y está claro que cuando tomas miles de decisiones, no vas a acertar en todas, es imposible. Creo que hemos tenido más aciertos que errores. Hemos hecho cosas mal, pero hay muchas y no puedes contemplarlas. Siempre hemos trabajado con la máxima ilusión y con nuestra capacidad tanto de conocimientos como económicos. El resultado final es bueno. Siempre lo he dicho: mantener la Liga de Fútbol Profesional ha llevado a estar aquí. Ahora pasamos el testigo a otras personas que tienen esa capacidad que nosotros no tenemos. Lo que no iba a dejar el club es en manos del primero que llegase. Y os puedo asegurar que han llegado cientos. Esto lo siento como mío aunque ya no esté.
- ¿En cuánto se ha cerrado exactamente la operación?
Al ser sociedades anónimas los números nunca los doy. Perdona que no te dé la cantidad exacta porque aquí hay más socios a los que les puede molestar que hable de cantidades. Si fuese sólo mío, lo diría. La operación se hizo muy rápido porque las cosas estaban bien en el club. Si hubiese habido denuncias o demandas, no se hubiese podido hacer en tres o cuatro días, retrasándose mucho la operación.
- ¿Había deuda?
Las deudas al final son relativas. Las tiene controladas el club. Tienes deudas, pero también cobros. Si tienes dos, tres o cinco millones y también lo mismo para cobrar, al final no es deuda. Tienes ingresos que hacer y cosas que te paguen.
- El día en que le compra el club a Guillermo Blanes ponen una cláusula para que el club no pueda salir de Almería. ¿Ha vuelto a poner esa cláusula en la nueva venta?
Eso ya no hay que ponerlo porque no se puede pasar de un sitio a otro. La Federación lo prohíbe. El último club que se cambió fue el Granada 74 (Ciudad de Murcia). Otra cosa son Segundas B, Terceras... Así que no ha hecho falta ponerlo en el contrato.
- ¿En esa compra a Blanes pensaba en un club como el de ahora o en otro mejor?
Yo he hecho lo que he podido y sabido. Doy gracias a todo el mundo. De Blanes a mí hubo un salto y ahora vendrá otro. Ellos tienen conocimiento, ganas y posibilidades económicas. Se dan todas las circunstancias para que ellos estén si apoyan las instituciones y la ciudad. Sencillamente porque pueden. Yo quería pasar el testigo a alguien que tuviese mucha capacidad, pero ellos tienen 'muuuucha' capacidad. He fallado, pero a la inversa. El club se ha consolidado en el fútbol español. Con esa satisfacción tenemos que estar todos.
- ¿Cómo cree que le va a recordar la afición?
Lo importante es la institución, que es la que representa a la provincia de Almería. ¿Que me recuerden bien o mal? No me da igual, me gustaría que me recordaran porque yo también voy a acordarme de toda la gente. Pero a partir de ahora hay que estar con la institución y con los nuevos propietarios, que son los que están apostando por este equipo.
- ¿Va a saber vivir sin fútbol?
Al que le gusta el fútbol difícilmente se puede olvidar del fútbol. Igual que al que no le gusta es complicado meterlo. Yo seguiré a la Unión Deportiva Almería como un aficionado más. Si alguna vez hago alguna gestión, será porque me lo pidan. No es mi cometido, pero si me llaman y me dicen que tienen un problema, yo me brindo, pero no me impongo. Estoy para colaborar, pero hasta ahí puedo hacer.
- ¿Se ha sentido querido por las instituciones y el tejido empresarial almeriense?
No me puedo quejar. Cada uno ha hecho lo que ha querido o lo que ha podido. Cuando no quieres o no puedes, no es obligatorio pedir. ¿Me podían haber ayudado más? Posiblemente. La conclusión final es que nuestra gestión y la de todos en general no ha sido tan mala cuando el club llega desde 18 o 19 años en LFP [la que comienza será el décimo octavo curso]. Esta labor ha sido de todos y tiene que ser labor de todos intentar ayudar y colaborar que el club vuelva otra vez a Primera y por qué no meternos en Europa. En el fútbol todo es proponérselo y si te lo propones y tienes la economía necesaria...