Pogba: Raiola utiliza a la Juve para presionar al Real Madrid
Los italianos desean al francés, pero es un fichaje que no encaja en sus finanzas. Aunque al agente le sirve para que en el Bernabéu agilicen su ofensiva.
Mino Raiola quiere sacar a Paul Pogba del Manchester United y va a intentarlo mientras sea posible. Al agente italiano le quedan menos de tres días (es casi imposible que los red devils dejen salir al francés con el mercado inglés cerrado; acaba este jueves a las 18:00 horas) y, mientras espera la próxima jugada del Real Madrid, ha empezado a moverse utilizando para ello a la Juventus. Cierto es que el mediocampista tiene una gran relación con el vestuario bianconero y con la ciudad de Turín (estuvo en mayo en la fiesta por el último Scudetto); su primer plan es jugar en Madrid, pero si no es posible no le haría feos a un regreso a Italia.
Fabio Paratici, director deportivo de la Juventus, lleva varios días en Inglaterra para intentar dos trueques: Dybala-Lukaku con el United y Cancelo-Danilo con el City; el segundo está muy cerca de cerrarse. El primero se complicó por las pretensiones del argentino (un sueldo de diez millones netos) y las comisiones de su agente Jorge Antun (otros 13 millones de euros), pero la Vecchia Signora dio un paso atrás por las dificultades para desprenderse de Higuaín y Mandzukic. La Joya, sin embargo, sigue teniendo posibilidades de jugar en Old Trafford: este lunes Tuttosport le dedicó su portada a la nueva oferta de la Juventus para entrometerse en el camino del Real Madrid para fichar a Pogba.
Según el rotativo italiano, muy cercano históricamente al club turinés, la oferta juventina incluía un trueque del centrocampista francés por Dybala, Matuidi y Mandzukic. Y, según pudo saber AS, efectivamente Mino Raiola está desde el lunes en Mánchester, después de haber cerrado en los últimos días el traspaso del también exjuventino Moise Kean al Everton. El asunto principal que ocupó a Raiola en las oficinas del United fue el futuro de Lukaku, que no cuenta para Solskjaer, aunque también se habló de Pogba: AS pudo saber que el entorno del agente ha filtrado una oferta juventina muy cercana a la informada por Tuttosport... Dybala, Matuidi y 40 millones de euros (que podrían llegar a 50).
Una oferta apetecible, pero con la que Raiola lo que pretende es azuzar al Madrid en busca de una reacción; con menos de tres días de margen para el cierre del mercado inglés, Pogba se impacienta, pues no quiere quedarse en el United otra temporada. Y sabe que Zidane le quiere a él y sólo a él; Van de Beek es una opción elegida por el Real Madrid en caso de que Pogba se demuestre imposible, pero no es en absoluto una preferencia del técnico marsellés.
Mientras, el Madrid sigue a la espera de una oportunidad para hacer su oferta definitiva por Pogba. No quiere pagar los 170 millones que, según medios ingleses, pide el United, pero sí tiene intención de satisfacer la única petición de Zidane para reforzar un centro del campo que, además, pide a gritos nombres nuevos en la medular tras las salidas de Ceballos y Marcos Llorente. En sus dos primeros intentos no recibió respuesta por parte del United; espera que, con el cierre del mercado en ciernes, los devils abran la mano al fin y se sienten a negociar, como ya hicieron en 2015 con David de Gea (los plazos ajustados y el famoso fax truncaron aquella operación).
En Turín están agazapados esperando que la buena relación de Raiola con el club (acaba de firmar de manera milagrosa a De Ligt, el central más prometedor de Europa, procedente del Ajax) logre la gesta de enderezar una operación imposible. Y Raiola trabaja a marchas forzadas para encauzar el futuro de su representado más relevante: el plan A sigue siendo llevarle al Madrid, pero quiere tener a mano una alternativa. La Juventus tendría casi imposible pagar un fichaje como el de Pogba, pero se aviene a participar en la táctica de Raiola mientras recauda dinero con el que, quizás, lanzarse a por el fichaje del francés. La directiva juventina espera reunir en las próximas horas unos 60 millones de euros procedentes de las operaciones de Kean y Cancelo. Una cantidad encomiable... aunque insuficiente en este caso.