Rubén fue un muro en Berlín y Denis puso la magia
El Celta goleó al Unión, pero el más destacado de los celestes fue su portero. Asistencia espectacular del ex del Barça a Brais. Mina y Sáenz ampliaron la ventaja.
Aunque el marcador se convirtió en algo secundario después de que Iago Aspas se retirara lesionado al cuarto de hora de juego, el Celta siguió engordando sus buenos números de pretemporada en Alemania. Ante el Unión Berlín, un conjunto recién ascendido a la Bundesliga, los vigueses consiguieron un contundente 0-3. Paradójicamente, en esta goleada el céltico más destacado fue su portero Rubén Blanco.
El mosense levantó un muro en Berlín. Las paradas del canterano, cuatro de ellas de mucho mérito, mantuvieron a cero la portería de un equipo con dos caras. Frágil defendiendo y con pegada arriba. El mismo Celta bipolar de las últimas temporadas.
A diferencia de la pasada campaña, cuando sin Aspas también era un conjunto vulgar en ataque, este curso Fran Escribá cuenta con más recursos ofensivos. Los dos fichajes estrellas plasmaron en la capital alemana lo que mejor saben hacer sobre un terreno de juego: Denis asistió en el 0-1 y Santi Mina ejerció de killer en el 0-2.
El ex del Barcelona se inventó un pase de fantasía con el exterior minutos después de que Aspas se retirara cojeando. Su servicio en profundidad dejó a Brais Méndez delante del portero y el '23' resolvió con una sutil definición por encima del meta Gikiewicz.
El tanto dio paso al recital de paradas de Rubén, que en su estreno en esta pretemporada demostró reflejos reaccionando a tiros lejanos y a remates a bocajarro. El de Mos incluso contó con la colaboración de la madera en un testarazo al larguero de los locales.
Mina y Sáenz
Los porteros resultaron decisivos, porque el del Unión sirvió en bandeja el segundo tanto al Celta en el minuto 56. Un mal pase de Gikiewicz lo interceptó Lobotka y el eslovaco regaló el tanto a Mina, que solo tuvo que fusilar. El punta vigués suma dos goles en dos amistosos.
En medio del carrusel de cambios, otro ex del Valencia vio puerta. Jorge Sáenz, que jugó una hora como mediocentro escoltando a Lobotka, remató de manera inapelable con la cabeza un saque de esquina botado por Pione Sisto.
El Celta se despide de Alemania manteniendo la condición de invicto este verano y, sobre todo, pendiente del traumatismo en la rodilla de Aspas.