Otros casos de rebeldía como Neymar: Costa, Modric, Bale...
Neymar ha sido el último futbolista en oponerse a trabajar con su actual club. Esta tendencia la reivindicó Ronaldo Nazario en 2002 y terminó fichando por el Real Madrid.
Neymar Junior está en rebeldía y no se ha presentado al entrenamiento del PSG como muestra de ello. El brasileño ha sido el último futbolista en tomar esta medida drástica para intentar forzar su salida de manera inminente. Hasta 12 grandes estrellas también tomaron en su día la decisión de desaparecer de las sesiones, aunque con distintas maneras de ejecutar este plan. Griezmann, hizo lo mismo el pasado domingo con el Atlético de Madrid.
Los pioneros más mediáticos
Esta medida se ha aplicado en multitud de ocasiones durante la última década, especialmente en los últimos cinco años. Sin embargo, el verdadero punto de inflexión se produjo con Ronaldo Nazario en 2002. El mítico brasileño quería jugar en el Real Madrid a toda costa y le comunicó al Inter que hasta que no le dejase marchar no le verían en la ciudad deportiva. Finalmente, se salió con la suya. A raíz de la huida de Ronaldo, otros grandes jugadores como Ribery, Fábregas y Aguero también optaron por hacer lo mismo.
Los combativos
"El Chelsea me trata como a un criminal", con esta frase Diego Costa quiso desaparecer de la hoja de ruta del club inglés para volver al Atlético de Madrid. Sus ausencias en los entrenamientos fueron claves para que el club rojiblanco fuese a por todas.
A diferencia del actual mercado estival, Bale deseaba cambiar de equipo en el verano de 2012. El galés también optó por la vía de la fuerza y llegó a argumentar que tenía problemas físicos, aunque llegó a jugar con su selección. Fue un auténtica partida de ajedrez, donde las declaraciones sirvieron como detonante a la posterior salida.
La dupla Coutinho-Dembelé y su interés en vestir la camiseta azulgrana les convirtió en los jugadores más buscados de Inglaterra y Alemania. Coutinho tardó más en salir, pero lo intentó con todo: desde pedir el Transfer Request hasta no acudir a los entrenamientos.
Los efectivos
Caso distinto al de Coutinho fue el protagonizado por Dembelé, quien en 2016 ya hizo lo mismo para irse al Borussia. Dos años después, volvió a ejecutar esta medida para fichar por el Barça. Dos veces; dos salidas.
Mateo Kovacic también logró en poco tiempo que el Real Madrid le dejase marchar al Chelsea. El croata se negó a entrenar con el grupo y la directiva blanca quiso facilitarle su cesión al conjunto blue. El que pudo haber sido su compañero de equipo, Thibaut Courtois, tampoco se cortó a la hora de no aparecer por la ciudad deportiva. Al final, obtuvo su premio...