La reválida de Lainez, que no pretende marcharse del Betis
El extremo mexicano, fichado sorprendentemente en enero, comienza una pretemporada como verdiblanco esperando no salir cedido.
Diego Lainez regresa a Sevilla de las vacaciones repleto de ilusión por el comienzo de una temporada con el Betis desde el principio. Llegado el pasado mes de enero con sólo 18 años todavía, cumplió los 19 en junio, el jovencísimo jugador mexicano no tuvo tiempo de adaptarse a un equipo que entonces jugaba en tres competiciones y con el paso de las semanas se fue quedando sin objetivos. Setién le fue metiendo en dinámica pero acabó contando muy poco con él. Su fichaje fue controvertido: se buscaban un delantero centro y un lateral zurdo... y acabó llegando él, un jugador de entre líneas. Por una fuerte inversión, además.
El extremo de Villahermosa pagó la adaptación a un fútbol con un ritmo muy diferente al que vivía en México y luego no pudo brillar con su selección en el Mundial Sub-20. Su traspaso por 15 millones de euros a Europa provocó que tuviera que liderar al equipo, que se volvió a casa sin ganar un sólo partido en la primera fase. Las críticas fueron feroces pero él se lo tomó con filosofía.
Este viernes, en el retorno a los entrenamientos, Lainez estará a las órdenes de Rubi. Un entrenador que en el Espanyol le sacó lo máximo a muchos jóvenes y que a priori quiere contar con él. Porque los rumores sobre una posible reventa o sobre todo cesión del futbolista han sido constantes en los últimos meses, debido a su falta de juego. Lainez lo tiene claro: quiere seguir y triunfar en Heliópolis.