Alemania ganó con comodidad a Nigeria y ya está en cuartos

Alemania ya está en los cuartos de final con un fútbol muy sobrio y poco vistoso que le está llevando con paso firme en este Mundial. Las germanas ganaron con comodidad a Nigeria y continúan invictas e imbatidas en este campeonato. Las africanas, con más corazón que fútbol, empezaron fuertes, pero sus errores defensivos le condenaron y se vuelve a casa después de regresar a octavos de final 20 años más tarde. Alemania es la primera cuarto finalista.

Empezó muy bien Nigeria, con intensidad y su privilegiado físico, llegaron a los dominios de Schult en los primeros compases. Pero no pudieron hacer daño a la meta alemana y las de Voss-Teckelenburg no perdonan. La primera la tuvo Magull tras una falta, pero Ohale taponó su tiro en el área pequeña cuando se cantaba el primero. Alemania, muy sobria, empezó a dominar y llegar. Pero las africanas defendían con todo. Córner tras córner hasta que en el sexto, la puso Magull y Popp, en el área pequeña y sin tener que saltar, mandó de un certero testarazo el balón al fondo de la red. La mejor forma de celebrar su partido número cien con la selección alemana. El tanto tuvo que ser revisado en el VAR, pero la colegiada japonesa lo dio por válido. Cuatro minutos más tarde, de nuevo tuvo que intervenir el VAR para pitar un penalti sobre Magull de Nwabuoku, que en su intento de despejar le dio a la rodilla de la germana. Dabritz, desde los once metros, no falló para poner el segundo y dar tranquilidad a las alemanas. Alemania tenía el partido donde quería y Nigeria tenía que dar un paso delante, pero no había manera. Las germanas seguían dominando y mandando.

Tras la reanudación, Nigeria sí dio ese paso adelante que necesitaba y volvió a acechar la portería de Schult, pero no conseguía probar a la portera del Wolfsburgo. Voss-Teckenlenburg hizo un doble cambio con el partido ya encarrilado. No estaban precisas las germanas, pero tampoco las nigerianas. La tuvo Buhl, que había salido en la segunda mitad, también Gwinn. Pero eran las nigerianas, con Ordega, la que más intención ponían. Huth en otro regalo de la zaga africana, pudo poner el tercero. Pero no fue hasta el 82' cuando en otro regalo de la defensa nigeriana, Gwinn presionó y Schuller no perdonó ante la portera. El partido estaba sentenciado y poco más pasó. Alemania sigue sin brillar, pero continúa siendo el equipo sólido y sobrio que va pasando ronda a ronda sin encajar y resolviendo los encuentros con comodidad.