El Huesca se remite a la cláusula de sus jugadores
Los azulgranas no quieren desprenderse de los siete jugadores que tienen con contrato. Enric Gallego y Eugeni Valderrama, son los más pretendidos.
La Sociedad Deportiva Huesca sigue trabajando desde la sombra en la planificación deportiva de la próxima temporada mientras espera el ansiado sobreseimiento de la causa como persona jurídica dentro de la `Operación Oikos´. Rubén García, como director deportivo, y Míchel Sánchez, como entrenador, están dando forma a un equipo en el que las siete piezas que tienen actualmente en plantilla (Pulido, Galán, Eugeni Valderrama, Gallar, Ferreiro, Enric Gallego y Valera) son intocables, salvo que se pague sus cláusulas de rescisión.
Enric Gallego parece tener varios pretendientes, como el Real Valladolid en Primera, pero los oscenses cuentan con él y no bajará el precio marcado en su cláusla de seis millones de euros. El club hizo un importante esfuerzo al firmarlo desde el Extremadura pagando 2´5 millones más unas variables que podían colocar la operación en los 4´5. En el contrato que firmaron el pasado mes de enero, los oscenses se aseguraron sus servicios hasta el 2022 por un jugador que tiene actualmente 32 años. Sin embargo, los 20 goles que marcó el pasado curso 15 en segunda y cinco en Primera, lo convierten en un objeto de deseo.
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Por su lado, Eugeni Valderrama también parece ser pretendido por varios clubes de Primera entre los que destaca el Eibar. Los azulgranas quieren que el medio tarraconense sea clave en los planes de Míchel y ya han mantenido varias conversaciones con el futbolista salido de la cantera del Valencia. El centrocampista tiene una cláusula cercana a los cuatro millones de euros y el Eibar parece interesado en su compra, pero al Huesca no le interesa, salvo que se pague la totalidad de su precio. En el montante del medio, El Valencia se llevaría una parte, por una cláusula que se firmó cuando recaló en el club altoaragonés.
Escriche podría salir cedido otra vez
El Huesca busca destino para Dani Escriche de cara a la próxima temporada. El atacante castellonense estuvo cedido en el Lugo, tras un traspaso que rondó los 500.000 euros pagados por los oscenses a los lucenses. La próxima temporada parece que no vestirá como azulgrana y su destino estará lejos de El Alcoraz.
