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TERCERA DIVISIÓN

La final de la Champions manda al Lealtad... ¡a un Colegio Mayor!

Juegan en Getafe el domingo a las 11:30. Pedro Menéndez, presidente del club, explica en As que les fue imposible encontrar alojamiento por los precios.

Los jugadores del Lealtad celebran uno de sus triunfos esta temporada.
CD_Lealtad

El Lealtad de Villaviciosa vivirá este fin de semana una situación anómala en el mundo del fútbol debido a la final de la Liga de Campeones entre Liverpool y Tottenham. El equipo asturiano jugará el domingo por la mañana, a las 11:30, contra el Getafe B, por lo que deberá pasar la noche del sábado en Madrid, al no darse las circunstancias para poder realizar el viaje en el mismo día. El precio de los hoteles, apartamentos... obliga al club a tomar una decisión a buen seguro inusual: dormir ¡en un colegio mayor!

Se hospedarán, pues, en el Camilo José Cela, en Villanueva de la Cañada y a una media hora en coche de la ciudad deportiva del Getafe. "En Madrid imposible, imposible. Y en las afueras parecido, ¡ni en Toledo! Lo único que pudimos encontrar que se acercaba a nuestro presupuesto era Ávila y claro, era hora y media en autobús. Tendrían que despertarse a las seis de la mañana. Sería una paliza para jugar", explica Pedro Menéndez, presidente del Lealtad de Villaviciosa, en As.

"Lo más cercano a nuestro presupuesto era Ávila"

Pedro Menéndez, presidente del Lealtad

El sorteo, celebrado el pasado 20 de mayo, deparó en los cruces un Lealtad de Villaviciosa-Getafe B, con la vuelta en la capital. En ese momento, el club asturiano se puso manos a la obra en busca de alojamiento, pero chocó contra la realidad de la inflación por la final de Champions. "Somos un club muy humilde, de un pueblo de 5.000 habitantes y vivimos muy al día en el tema económico", explica el Presidente, que lamenta no haber podido encontrar otra solución.

"Llamamos a la RFEF. Intentamos quedarnos en la CIudad del Fútbol de Las Rozas, pero no había manera... Está todo hasta arriba con la Champions, invitaciones para entrenadores y jugadores que vendrán a ver el partido. Todo lleno", expone para, a continuación narrar cómo llegó a la solución: "Por una amistad que tenía en el mundo del fútbol, de cuando jugaba. En la Camilo José Cela había un hombre que igual me podía ayudar. Se comprometió a recogernos, darnos de cenar, habitaciones, desayuno... No tenía mucho sitio, pero tampoco teníamos problema, con que puedan descansar futbolistas y entrenadores...".

Vista la circunstancia, Pedro Menéndez, medio broma medio en serio, se ofrecía a dormir en el autobús si eso ayuda a que los futbolistas descansen. Preguntado por si le asustaba que fiestas de estudiantes pudieran perturbar el sueño de la plantilla, insistió en lo agradecido que está por haber encontrado solución al problema: "Los jugadores tienen una ilusión grandísima y ya están acostumbrados a madrugar para ir a trabajar. Subir a Segunda B cambiaría la vida a muchos. De hecho, no nos asusta, sino todo lo contrario. Estamos muy agradecidos a la Universidad. Aunque haya un poco de ruido, es mucho mejor estar a media hora del campo que pegarse un madrugón del demonio".

En Tercera División, los propios clubes son los que tienen que acordar el horario de los partidos, si bien es cierto que, de una u otra manera, prevalece la costumbre del local. Vista la dificultad de encontrar alojamiento, el Lealtad trató de que no se jugara a las 11:30, hora habitual del Getafe B, pero no se consiguió: "Nos dijeron que estaban acostumbrados a jugar siempre a esa hora, que no quería cambiar los hábitos que tienen". No es el único problema, también las entradas: "Por primera vez desde que soy presidente habíamos conseguido llenar dos buses en el pueblo, pero solo tenemos 70 localidades".

Otra de las alternativas era el viaje de madrugada. Sin embargo, el presidente del club nunca se lo planteó: "Jugamos a las 11:30, el trayecto en bus es de cinco horas... Si salimos a las cuatro de la mañana de allí y después tenemos que jugar... Y con 30 grados de calor. A los jugadores los mataríamos". Eso sí, el contratiempo es solo de una noche: "Nada más acabar el partido nos volvemos. Ojalá pudieran venir los chavales del colegio mayor a apoyarnos, pero con el tema de las entradas... Si conseguimos el ascenso nos iremos lo más rápido posible para celebrarlo con nuestra gente en Villaviciosa".

Pedro Menéndez explicó también cómo fue el momento de comunicárselo a los jugadores: "Cuando surgió la posibilidad del Colegio Mayor no lo vi mal. Los jugadores se asombraron un poco, pero nadie puso problema". Desde luego será una situación inusual, ya que en Tercera División casi nunca se viaja en autobús y, en este caso, el presidente cuenta a As que cada futbolista va en su propio coche. De todos modos, no quiere poner excusas: "No tenemos ningún problema y no tendremos disculpa por dormir ahí. Estamos habituados a madrugar y eso es mucho peor que descansar aquí".

El Atlético Saguntino tiene el mismo problema, pero viajará en AVE

El Atlético Saguntino se enfrentará a Las Rozas el domingo a las 12:00 en la localidad madrileña. El club, consultado por As, explica que viajarán en AVE esa misma mañana y que no se plantearon hacer noche en Madrid. Pedro Menéndez, conocida esta situación, informó que también se plantearon viajar en AVE desde León, pero era una opción menos viable, aunque cree, eso sí, que la solución adoptada por el equipo valenciano es la mejor: "En AVE es distinto, se puede descansar más. En autobús no, de Asturias a Getafe con la parada son siete horas. Llegas al campo y lo que menos ganas tienes es de jugar al fútbol".