Las rajadas de Ceballos y Bale que les condenan ante Zidane
Ambos fueron explícitos al hablar del francés, que ahora regresa al vestuario. El sevillano apenas contó para él y el galés pasó de intocable a suplente.
Hay dos jugadores en el Real Madrid a los que la noticia de que Zidane regresa al club blanco para hacerse cargo del equipo no les ha debido sentar demasiado bien: Bale y Ceballos. No sólo por lo meramente deportivo, en lo que tampoco van a salir beneficiados en absoluto: el galés pasó de titular indiscutible como parte de la bbC a suplente, yendo al banquillo en dos finales de Champions League consecutivas; y el sevillano firmó hace dos veranos por 16,5 millones tras ser el mejor jugador de la Eurocopa Sub-21, pero Zidane apenas le dio 899 minutos en toda la temporada.
Tampoco es que la situación de ambos haya cambiado tanto: Bale ha perdido el sitio en este Madrid post-Cristiano y Ceballos sí ha podido disfrutar de más minutos esta campaña (ya lleva 1.744'), pero en los partidos de enjundia no ha contado (cero minutos ante el Barcelona en los dos partidos de Copa y ante el Ajax en los dos de Champions). El problema, sobre todo, estará en lo explícitos que han sido ambos jugadores en torno a las diferencias que mantenían con el entrenador francés, con declaraciones que ahora se les pueden volver en contra.
Ceballos fue el más contundente en Radio Marca: "El que tiene que explicar por qué no me daba oportunidades es él. Yo trabajaba, intentaba ponérselo difícil, pero llega un momento en el que ves que es imposible. Marco dos goles en Vitoria y al partido siguiente en Dortmund jugué un minuto. Cuando pasan las semanas y no te sientes importante, es más difícil. Hubo un momento en que di la temporada por perdida, estábamos a 15 puntos en Liga y sólo nos quedaba la Champions, pero yo no entraba en la dinámica".
El sevillano no se dejó nada en el tintero al comentar lo mal que se sentía a las órdenes del francés: "Yo le pregunté que por qué no jugaba porque no lo entendía. Él me dijo que valorara los jugadores que tenía por delante. Pero hubo un momento de la temporada en el que Kroos y Modric estaban lesionados y él cambiaba el sistema para poner a otros jugadores. Eso te quema un poco y te duele". Se refiere Ceballos, probablemente, al partido de París ante el PSG, en el que, sin el croata y el alemán (ni Isco), Zidane formó con un 4-4-2 con Casemiro-Kovacic en el doble pivote, Lucas y Asensio en las bandas y Cristiano y Benzema arriba. Una formación con extremos puros que no se ajustaba ni al 4-3-3 ni al 4-4-2 en rombo que solía usar el técnico de Marsella.
Aunque lo maquilló poco después, valorando como positiva la experiencia a pesar de todo, con recado final incluido: "Nunca hay que bajar los brazos porque mi objetivo es triunfar en el Real Madrid. Ahora intento devolverle a la afición lo que no me vio. No es rencor. Venía de hacer un gran Europeo Sub-21 siendo el mejor jugador. Y de buenas a primeras, al ostracismo... El año pasado no fue un buen año para mí, pero como futbolista me ha dado madurez. Él fue claro conmigo y no le guardo rencor. Quizá no sabía lo que siente un jugador en el banquillo. Y le servirá también en el futuro para no cometer los errores que ha cometido aquí...".
También habló Ceballos sobre aquel cambio de apenas 30 segundos en Leganés que tanta polémica levantó: "Escuché a muchos jugadores decir que a cualquiera le gustaría jugar 30 segundos en el Real Madrid... Los entrenadores saben muy bien lo que hacen en cada momento. El partido no iba 2-1, para perder tiempo. Iba 3-1, con el partido cerrado y no era el cambio idóneo... Estaba un poco frustrado ese día. Él me dijo que estaba en un momento de nerviosismo, le vi en el vestuario y le vi dolido. Al día siguiente, nada más empezar, me llamó y me pidió perdón en el entrenamiento. Eso dice mucho de su persona, pero el jodido era yo". La sentencia fue durísima: "Si seguía Zidane, tenía que buscarme una salida".
Con menos efusividad, pero Bale también le ha dejado varios recados a Zidane desde que el francés dimitió. "No habló conmigo después de la final (de Kiev); de hecho, todavía no he hablado con él.Nuestra relación era buena. No diría que somos mejores amigos, tan solo fue una relación estrictamente profesional. En Kiev me sentí realmente frustrado por no empezar desde el inicio. Había jugado bastante bien desde que regresé de la última pequeña lesión que había tenido en diciembre. Marqué cinco goles en mis últimos cuatro partidos de Liga de la temporada y sentí que merecía estar involucrado desde el principio", dijo en FourFourTwo.
En otra conversación con el Daily Mail, aseveró el británico: "Estaba bastante enfadado, para ser sincero. Obviamente, sentía que merecía ser titular. Estaba marcando goles. Así que, sí, supongo que fue difícil poner el enfado a un lado. (Que Lopetegui hable inglés y Zidane no lo hiciese) obviamente ayuda. Puedo hablar con un entrenador en castellano, pero quizás no entrar en la profundidad de detalle que necesito". Y, preguntado por cuál de los dos era mejor técnico, fue enigmático: "No estoy seguro de querer responder a eso".