"Lo primero es despegarnos bien de la zona de abajo"
Cristian Álvarez considera que deben tomarse con seriedad lo que resta de temporada y hacerse fuertes en La Romareda: "Es una cuenta pendiente".
—¿Se sienten algo decepcionados por los resultados obtenidos en los tres últimos partidos?
—Nosotros teníamos en mente sacar muchos más puntos para poder aproximarnos a los puestos de arriba. Creo que hemos hecho algunos partidos dignos, podríamos haber sacado un poquito más y el último partido en La Romareda, lamentablemente, se nos puso cuesta arriba.
—El equipo siempre crea ocasiones, pero no termina de ser efectivo a la hora de rematar.
—Estamos haciendo un desgaste enorme. En todos los partidos estamos llevando nosotros el ritmo de juego, estamos haciendo un gran número de pases, estamos haciendo un fútbol muy bueno, pero es cierto que en los últimos metros, que es donde se define un partido, no estamos siendo contundentes y nos está pasando factura.
—¿Qué análisis personal hace de la debilidad del equipo en las jugadas a balón parado?
—Es una suma de muchas cosas. En el balón parado, tanto a la hora de defender como de atacar, se requiere mucha intensidad, mucha concentración, estar fuertes en la marca… En los anteriores encuentros creo que hicimos partidos más correctos en el balón parado, pero en el último tuvimos un momento de distracción. El primer gol fue una jugada que se desvía y su delantero fue más rápido y el segundo fue una pérdida de marca. Hay que seguir trabajándola como la estamos trabajando en los entrenamientos y a ese trabajo hay que sumarle la intensidad y la seriedad de los partidos, ya que al final el balón parado está volcando la balanza para las victorias o las derrotas de los equipos.
—¿Qué cree que le está pasando al equipo en La Romareda para ser uno de los peores locales de la categoría?
—Es cierto que en La Romareda hemos sacado quince puntos. Es una cuenta pendiente. Aún quedan partidos en casa, nosotros nos habíamos acostumbrado a hacernos fuertes en La Romareda, ahora no lo estamos logrando y en lo que resta de temporada debemos intentar hacernos fuertes ahí porque La Romareda siempre ha sido una fortaleza y un punto de partida para lograr los objetivos.
—Con el equipo en tierra de nadie, ¿cómo se afrontan estos últimos meses de competición?
—En primer lugar debemos despegarnos bien de la zona de abajo porque matemáticamente todo es posible. Tenemos que tomarnos las cosas con muchísima seriedad porque quedan muchísimos puntos en juego y debemos alejarnos de la zona de abajo. Y después habrá que acabar la temporada con la máxima dignidad de lo que representa jugar en una institución como el Real Zaragoza. Por tanto, vamos a estar 100% metidos hasta el último día de entrenamientos.
—El otro día recibió una ovación tremenda de La Romareda tras una de sus paradas. ¿Qué sintió?
—Se siente con muchísimo agradecimiento. En ese momento se le pone a uno la piel de gallina y es un instante maravilloso. Agradezco poder vivir eso dentro de un campo de fútbol y agradezco que sea aquí, pero no me puedo despegar del colectivo. Esto es un equipo y todos debemos estar juntos tirando hacia delante, independientemente de las individualidades.
—Usted tiene contrato, pero ¿se ve jugando otra temporada en Segunda con el Real Zaragoza?
—No estoy pensando en eso ahora.