Un 2019 de metamorfosis cadista
De empezar el año con muchas dudas y falta de identidad, el Cádiz ha vuelto a su esencia para conseguir victorias, alcanzar la salvación y para pelear por algo más.
Es evidente, viendo resultados y clasificación, que el Cádiz ha experimentado una auténtica metamorfosis en lo que va de año. Terminar el 2018 con un momento de forma extraordinario, venciendo por 3-0 al Deportivo, no se pudo refrendar en enero. Tanto, que hasta febrero no llegó la primera victoria que, en cierto modo, frenaba la bajada de puestos en la tabla clasificatoria que por falta de goles y sensaciones se estaba produciendo.
Al nuevo año, el Cádiz entró en sexta posición a cinco puntos del liderato. En enero, la derrota ante Osasuna y los empates ante Granada, Almería y Mallorca encendían un poco las alarmas en aquellos que miraban al ascenso. Tanto, que la derrota en Oviedo para inaugurar el mes de febrero provocó que los amarillos se fueran a la novena posición con 39 puntos. A diez del primero, a tres del playoff y, sobre todo, a quince de la permanencia matemática.
La aparición de Darwin Machis y Querol dio más opciones en el ataque y por tanto amplió la baraja de Cervera. Unido a que el equipo regresó a su esencia en cuanto a juego, el Cádiz dio una vuelta de tuerca a su filosofía ganando en un campo complicado en Alcorcón. Con remontada incluida. Era la jornada 25 y los hombres de Cervera mandaban el mensaje claro de que no había desaparecido de la lucha por los puestos de arriba.
El 2-0 al Tenerife, un sufrido 2-3 ante el Nàstic de Tarragona y el 1-0 contra el Albacete son, junto a la victoria ante el Alcorcón, los cuatro resultados que han llevado al equipo amarillo a la sexta con 47 puntos. A seis puntos del segundo y siete del primero. Llegan los goles, los amarillos han conseguido mantener la portería a cero en sus últimos dos partidos en Carranza y, con la permanencia en la mano, se pueden tomar la licencia de soñar con un objetivo más ambicioso.
La recuperación de Sergio Sánchez, la llegada de jugadores de nivel en el mercado invernal como Darwin Machis y también la insistencia de Álvaro Cervera de simplificar el juego y poner la defensa de la portería en lo alto de la lista de prioridades han sido algunos de los argumentos que ha permitido al entrenador del Cádiz lograr la salvación matemática en el mes de marzo por tercer año consecutivo. Nada fácil en una apretada Segunda División. Lo que resta de competición, tiempo para pelear por cotas altas.