1x1 del Barça: un Messi de escándalo aplasta al Sevilla
Estratosférico partido del crack argentino que se marchó del Sánchez Pizjuán con la sensación de haber dado ya media Liga al Barcelona.
Ter Stegen: No se le puede señalar en ninguno de los dos goles. En el primero fue una jugada de contragolpe donde Navas se quedó solo ante el meta alemán y en el segundo un error flagrante de Umtiti a la hora de hacer el fuera de juego propició el tanto de Mercado. Curiosamente aparte de estos dos remates no tuvo mucho más trabajo bajo los palos. Bien a la hora de sacar el balón con los pies, aunque en algunos momentos arriesgó demasiado.
Semedo: Mal partido del lateral portugués, que se vio superado en muchas ocasiones. Tampoco Arturo Vidal es que le ayudara mucho a la hora de las coberturas, por lo que la banda derecha fue prácticamente inoperante en la primera parte. Ya no salió tras el descanso. Una lástima porque se trata de un frenazo a la progresión que estaba exhibiendo en esta temporada.
Piqué: Altísimo rendimiento del central catalán, que tuvo muchos problemas por la insistencia del Sevilla en amontonar jugadores en el área, sobre todo en las jugadas de estrategia. Está tan sobrado físicamente que hasta se permitió una jugada de contragolpe en la que llegó a posicionarse en el área y hasta intentar driblar para marcar. Vio una amarilla por llegar tarde y hacer falta.
Umtiti: Empezó francamente mal. De hecho, en los dos goles sale más bien mal parado. En el primero peca de lentitud y falta de decisión a la hora de frenar un contragolpe y en el segundo peca de inocencia al dejarse robar la cartera al romper el fuera de juego. Afortunadamente en la segunda parte espabiló un poco y su juego fue mucho más proactivo. En todo caso, se le notó demasiado la falta de ritmo. Una apuesta quizás un tanto arriesgada de Valverde, pero de la que finalmente salió airoso.
Alba: Partidazo del catalán, que ante los despistes de Umtiti se tuvo que multiplicar por toda la banda izquierda para sacar balones fuera o frustrar transiciones del rival. Además el lateral se las tenía que ver con uno de los hombres más rápidos del Sevilla, Navas, por lo que tampoco podía salir desbocado en ataque. Su ímpetu y dinamismo salvó al equipo de más de una jugada comprometida.
Sergio Busquets: Muy irregular. Cometió errores de bulto que bien le pudieron costar muy caros al equipo, con pérdidas de balón absurdas o dejándose robar la cartera directamente, pero en honor a la verdad también fue decisivo en muchas de las recuperaciones del equipo y a la hora de dar continuidad al juego del equipo.
Arturo Vidal: Uno de sus peores partidos desde que juega en el Barcelona. No le salió una a derechas con el balón, enviando en más de una ocasión auténticos melones a los compañeros. Sin balón tampoco es que estuviera muy acertado en esta ocasión. Fue sustituido por Valverde al descanso.
Rakitic: El croata recuperó su mejor versión. Muy concentrado en defensa y dinámico en ataque. Su juego ganó muchos enteros respecto a los últimos partidos. Está claro que este jugador no conoce la palabra cansancio. Fue vital a la hora de dar equilibrio en el mediocampo, sobre todo en una primera parte en que Vidal apenas aportaba nada. Y además dio una enorme asistencia a Messi para que marcara un gran gol de volea.
Messi: Uno ya no sabe cómo ser original o decir algo diferente a la hora de hablar del mejor jugador del planeta. Así pues empezamos simplemente por los fríos datos que arrojan un ‘hat trick’ y una asistencia. Pero si vamos un poco más allá, entonces hay que explicar la extraordinaria volea en el primer gol, el enorme detalle en el segundo con un remate ajustado a la escuadra o la sutil vaselina en el tercero superando al meta del Sevilla. Y como colofón una gran asistencia a Suárez para que disipara finalmente los fantasmas de la falta de gol. Su capacidad de liderar y aglutinar al equipo es algo tan inaudito como incomprensible para cualquier otro mortal.
Luis Suárez: Parecía que se iba a marchar un partido más con el casillero a cero, pero en el último suspiro su amigo Messi le brindó en bandeja de plata una enorme asistencia para que el charrúa solo tuviera que levantar el balón y alojarlo al fondo de la red. Antes de este tanto, su juego fue un compendio de carácter y agresividad. Siguen sin salirle la mayor parte de las cosas que quiere hacer, pero lo más importante en que nunca baja la cabeza y sigue intentándolo. Generó mucha parte del juego ofensivo del Barça y eso en muchas ocasiones no tiene precio.
Coutinho: El brasileño fue claramente de más a menos. Tras una primera parte más que aceptable, jugando como extremo izquierdo, empezó la segunda parte más retrasado, como interior, y aquí es donde se desdibujó de forma alarmante. Valverde se dio cuenta de sus carencias y le reemplazó por Aleñá.
CAMBIOS:
Sergi Roberto: El canterano se ubicó en la banda derecha sustituyendo a Semedo. Un partido muy serio el suyo, con mucha aportación ofensiva y buscando paredes con Dembélé.
Dembélé: Poco a poco va recuperando su mejor versión. Salió tras el descanso, colocándose como extremo derecho. Dio profundidad y desequilibrio al juego, ayudando así a Messi a tener más espacios para construir el juego. Enorme la asistencia que dio a Leo para que marcara su segundo gol. Pidió insistentemente un penalti de Navas, que el árbitro se lo negó de forma vehemente.
Aleñá: Supo ocupar el espacio que parecía que Coutinho tenía perdido. Jugó con personalidad y carácter. El tercer gol de Messi llegó gracias a un remate suyo que rebotó en un defensa y que aprovechó inteligentemente el crack argentino.