Solari tiene dos metas: afinar la puntería y la forma física
El argentino ha diseñado un plan de entrenamientos para esta semana que prima la parcela física y la definición para evitar nuevos tropiezos.
El Real Madrid completó este jueves su segundo entrenamiento de la semana de cara a la visita al Levante de este domingo (20:45 horas, Movistar Partidazo). Lo hizo tras los dos días de descanso (lunes y martes) que Solari proporcionó al equipo, que finalizó ante el Girona el pasado domingo una agotadora racha dentro del calendario: 14 partidos en 46 días. El técnico argentino prefirió mantener, pese a la derrota contra el equipo catalán en casa el pasado domingo (1-2), los dos días de parón para que los jugadores pudiesen cargar pilas. Esa fue la primera parte de su plan; la segunda está quedando patente en en las sesiones de la semana.
Solari tiene dos metas en esta semana, perfecta para poder trabajar con tranquilidad pensando en lo que viene por delante: afinar tanto la forma física como la puntería del Real Madrid. Ante el Girona, se apreció en el Madrid un ligero bajón físico en el segundo tiempo que facilitó la remontada visitante. Nada preocupante, pues el cargadísimo calendario de enero y febrero acabó por pasar factura, pero Solari y Antonio Pintus, preparador físico blanco, han dedicado esta semana la mitad de los entrenamientos al trabajo de la parcela física: el miércoles los jugadores blancos hicieron toda la primera parte del ensayo sobre el césped; el jueves arrancaron en el gimnasio y luego continuaron con potenciación muscular sobre el verde. Desde el cese de Lopetegui y de su preparador físico de confianza, Óscar Caro, Solari se ha puesto en manos de Pintus para que saque el máximo posible de la parcela física de la plantilla y la apuesta ya está rindiendo frutos.
Este jueves, tras la exigente parte física del entrenamiento, Solari dedicó casi todo el resto de la sesión a ejercicios de finalización ante portería, con uno o dos defensores. El mensaje es claro: hay que afinar la puntería. Ante el Girona, el Madrid volvió a pecar de lo que le venía sucediendo en los primeros meses de competición: genera mucho más de lo que luego resuelve. Entre el 1-0 de Casemiro y el empate que anotó Stuani de penalti, el Madrid realizó cuatro remates: dos a puerta y dos fuera.
Destacó un remate de Benzema en el segundo palo, sin oposición, que estrelló en el costado de la portería. Y antes también había malgastado un buen puñado de ocasiones: dos remates que Benzema dejó pasar en el área pequeña, un mano a mano de Lucas, varios tiros de Marcelo desde la frontal... Tuvo varias veces el equipo de Solari el 2-0, lo que hubiese conjurado la remontada del Girona, pero falló y acabó cediendo tres puntos que le han costado buena parte de sus opciones en LaLiga. Solari quiere más goles y este jueves dedicó buena parte de la sesión a trabajar en ello.