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El Lugo hace agua y ya encaja más de dos goles por encuentro

El conjunto rojiblanco es el cuarto que más encaja de la categoría. En las cuatro últimas jornadas ha recibido diez goles.

El Lugo hace agua y ya encaja más de dos goles por encuentro
PEDRO AGRELODIARIO AS

El CD Lugo se desangra en defensa. El conjunto dirigido por Alberto Monteagudo se encuentra en el vagón de cola de la categoría no solo en lo que a puntos se refiere, sino también en el número de goles encajados. Los albivermellos llevan 33 goles en contra en 26 jornadas, solo superados por Córdoba (47), Extremadura y Nástic (38), lo que arroja una media de 1, 2 goles por encuentro. Pero la situación se ha agravado aún más en las últimas jornadas, dado que en los últimos cuatro encuentros el Lugo ha encajado la friolera de 10 goles, una media de 2,5 tantos en contra por partido, unos números inasumibles para un equipo que está luchando por conservar la categoría.

Los guarismos no invitan al optimismo en el seno de la entidad. El propio Monteagudo declaró en rueda de prensa previa al partido frente al Mallorca, que se saldó con otros tres goles en contra, que “es una lástima hacer tantas cosas bien y que unos pocos errores nos condenen”, a la vez que pidió “más contundencia”, deseos que cayeron en saco roto en Son Moix, donde el Lugo volvió a caer con estrépito y dando, especialmente en defensa, mala imagen.

Si bien el equipo no ha terminado de funcionar bien a nivel defensivo a lo largo de toda la temporada, esta mala racha del último mes puede explicarse en la ausencia de jugadores que elevaban el nivel defensivo del equipo. Por un lado, la salida de Azeez en el último día del mercado invernal dejó mermado el pivote albivermello, sobre todo teniendo en cuenta que el jugador se había vuelto indiscutible con Monteagudo. Además, la salida de Kravets combinada con la lesión de Luis Ruiz y la contratación de un Lebedenko falto de forma y ritmo (aún non ha debutado) hicieron que Campabadal ocupe el flanco izquierdo de la zaga, donde baja alarmantemente sus prestaciones, y que Gerard Valentín ocupe el diestro, donde tampoco está rindiendo al nivel esperado. Lo que está claro es que el equipo debe endurecerse en defensa si quiere no pasar graves apuros clasificatorios.