Qué fue del Átomo Ognjenovic: el Madrid lo fichó hace 20 años
Perica Ognjenovic firmó el 14 de enero de 1999, costó 400 millones de pesetas y sólo jugó 12 partidos antes de irse a China, Malasia... Tras dirigir la Sub-18 serbia, está en el paro.
"Es pequeño y explosivo, como un átomo". Ésa fue la carta de presentación de Perica Ognjenovic (Smederevska Palanka, 27-2-1977) cuando fichó por el Real Madrid el 14 de enero de 1999. Un delantero serbio de apenas 1,71 metros (de ahí lo de Átomo) que venía avalado por Miljanic, su descubridor, y que se fue dos años después por la puerta de atrás con sólo 12 partidos (la mayoría de poco fuste) como madridista...
"Es espectacular y talentoso", así le promocionó el histórico entrenador yugoslavo en una entrevista en As nada más aterrizar el chico en Madrid, con 21 años. El club se había fichado en él cuando fue a espiar otro fichaje ruinoso (el de 'Rambo' Petkovic) y Mijatovic fue su cicerone en la vieja Ciudad Deportiva.
Un salario millonario para la época (125 millones de pesetas, unos 850.000 euros), fichaje caro (400 millones de pesetas) por ser una joya del Estrella Roja y un futbolista que nunca contó para Toshack ni Del Bosque. Lo curioso es que el Mallorca pidió su cesión el primer año... y el Madrid prefirió mandarles a Etoo. Como único momento de gloria, un partido en el frío diciembre de 1999 ante el Espanyol, donde jugó de extremo. "Chamartín necesita más como él", se atrevió a decir Del Bosque. Fue el fogonazo del Átomo.
De fichaje ilusionante a denunciar al club año y medio después. El Madrid no le había inscrito y el serbio se acogió al famoso Decreto 1.006 para quedar en libertad. Se fue el 6 de agosto de 2001 sin decir ni adiós. Fue el inicio de un carrusel de fichajes como jornalero con botas. Por Alemania (Kaiserslautern), China (Dalian Shide), Ucrania (Dinamo Kiev), Francia (Angiers), Selangor (Malasia), varios equipos griegos y un retiro con 34 años tras volver a la Jagodina de Serbia. Pese a ser delantero, había marcado seis goles en los 11 años que transcurrieron tras abandonar Concha Espina.
Desde entonces, allá por 2011, se volcó en ser entrenador. Incluso apareció como seleccionador Sub-17 y Sub-18 de Serbia, antes de ser despedido por otro viejo conocido del fútbol español, Darko Kovacic, el pasado verano. El Átomo está en el paro, pero sigue en la memoria de muchos aficionados como uno de los fichajes más pintorescos del Madrid contemporáneo.