"Estoy recuperada, espero que Vilda me llame para el Mundial"

Irene Paredes es la futbolista gipuzkoana más internacional. Central que triunfa en el París Saint Germain, con el que aspira a todo en el nuevo año que comienza en breve; y una fija en las convocatorias de Jorge Vilda en la selección nacional absoluta.

Acaba de recuperarse de una lesión complicada, a tiempo para poder disputar el Mundial de Francia 2019, la gran cita futbolística del año en la que España aspira a dar un salto de gigante para situarse con los mejores, siguiendo la estela brillante que dejó la sub-17 en este año 2018 que llega a su fin. “Estoy recuperada de la lesión, ya con ganas de retomar los entrenamientos, espero volver a estar en la lista, espero que Jorge Vilda me llame”, señala Irene Paredes, justo después de recibir el premio al Mejor Deportista de Gipuzkoa en 2018 de la Asociación de la Prensa deportiva de la provincial (APDG) a la que pertenece el Diario AS. La liga ganada con el PSG y el título logrado en Chile con la selección nacional fueron claves en la votación para ser designada la mejor. Es la primera futbolista que se impone en este galardón que cumple 30 años.

La jugadora gipuzkoana se impuso en una reñida votación a otros cinco buenos nominados, como el piloto de trialsin, Jon Areitio (subcampeón mundial), el boxeador Sebas ‘Latigo’ Pérez (campeón de Europa del peso gallo), la jugadoras de rugby Lide y Amaia Erbina, el regatista de vela Xabier Fernández (subcampeón de la Volvo Ocean Race), y el piragüista Aitor Gorrotxategi (campeón del mundo sub-23). “Estoy gratamente sorprendida por este galardón. para nada me lo esperaba, venía a la gala muy ilusiona por estar entre los nominados con otros grandes deportistas de gran nivel, me parece increíble. Está claro que me ha costado mucho trabajo llegar hasta aquí y recibir este gran trofeo es un honor”, explica Irene Paredes al Diario AS. En esa gala se homenajeó también a Xabi Prieto, el ex jugador de la Real Sociedad retirado en este 2018 del fútbol profesional tras más de 500 partidos defendiendo la camiseta del equipo txuri-urdin. El Txuri-Berri de curling, cuyos jugadores lograron la medalla de plata en el Mundial mixto, se alzaron con el premio al mejor club gipuzkoano del 2018. Su gesta es muy relevante, al conseguir la primera medalla internacional para España en esta modalidad y romper barreras, al contar sólo en nuestro país con 200 licencias de este deporte.

Irene Paredes reconoce que en este 2019 tiene retos muy importantes por delante y que espera cumplir para seguir aumentando su extenso palmarés. “Sigo manteniendo la misma ilusión, disfruto entrenando cada día para recibir estos frutos. Ha sido un largo camino que inicié en mi pueblo Legazpi para llegar hasta aquí, al Paris Saint Germain. Este año 2019, hay retos muy importantes como jugar mi segundo Mundial. Aspiramos a todo, la copa, champions y la Liga. Espero que esta distinción suponga también un espaldarazo para el fútbol femenino, en su crecimiento y difusión en los medios y que sea un referente para las jóvenes jugadoras", comenta.