El presidente y máximo accionista del Celta de Vigo, Carlos Mouriño , trasladó al alcalde de la ciudad, Abel Caballero, su preocupación por el estado de Balaídos , que, a su juicio, no cumple con las exigencias de un estadio "digno, confortable, moderno y seguro" para los aficionados. En un burofax, con fecha de 17 de diciembre, el dirigente celeste lamenta que en Balaídos sólo se está haciendo "un simple lavado de cara" y denuncia que la remodelación pactada entre el ayuntamiento y el club no se está realizando. "Los problemas siguen existiendo, y hay un clamor social y una gran preocupación por todos, de cómo será el futuro y de si la seguridad está asegurada . Como sabrá, este fin de semana se denunció nuevamente la situación de la grada de Marcador , al igual que sucede en la grada de Gol , sobre los graves problemas estructurales que afecta a dichas zonas", escribe Mouriño en su carta. Además, el presidente del Celta reclama saber si el estadio pasó "las respectivas inspecciones técnicas y el resultados de las mismas ", y se pregunta si en el próximo partido de Liga, contra el Athletic Club en enero, podrán "abrir" estas dos gradas.