NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

LEGANÉS

La revolución invernal que está por venir en el Leganés

El club prevé muchos movimientos con tres líneas básicas de actuación: reducir el número de jugadores que terminan contrato, dar salida a futbolistas sin minutos y contratar jugadores en propiedad.

Actualizado a
Pellegrino.
JUANJO MARTINEFE

La cercanía del mercado invernal anticipa una revolución en el Leganés. Mauricio Pellegrino, su entrenador, ya avanzó hace unos días que será una ventana de fichajes agitada por Butarque. Las líneas fundamentales de actuación en las que se moverá el club madrileño, según sus palabras, son tres: reducir el número de jugadores que terminan contrato el próximo 30 de junio de 2019, dar salida a futbolistas sin minutos en el equipo y contratar jugadores en propiedad que aumenten la calidad del plantel pepinero.

La situación es la siguiente: el Leganés posee 15 jugadores que, a día de hoy, no seguirán la temporada que viene. De ellos, once son cedidos y cuatro terminan contrato. Eso, según lo que se deduce de las palabras de Pellegrino, genera inestabilidad en el equipo y vestuario. Tener a más de la mitad del plantel distraída por qué será de su futuro no ayuda en alcanzar los objetivos globales del grupo.

Por eso el entrenador y la dirección deportiva se pondrán manos a la obra desarrollando estas tres estrategias que se pueden cruzar entre sí.

Opciones de compra

Por ejemplo, el club está meditando ejecutar ya alguna de las opciones de compra que tiene sobre cedidos y así matar dos pájaros de un tiro reduciendo el número de jugadores que acaban contrato y, de paso, fichando en propiedad a hombres de su actual plantilla.

En esta situación se encuentran Jonathan Silva (opción de compra de tres millones), Omeruo (cinco millones) y Juanfran. Los tres son potenciales candidatos a quedarse.

El primero, Silva, está cedido por el Sporting de Portugal por 400.000 euros (200.000 fijos, 200.000 en variables). El Chelsea prestó al segundo, a Omeruo, a coste cero con esa posibilidad de compra siempre que los ingleses se lleven un 20% de una futura venta a un tercero.

Juanfran llegó a Butarque por 300.000 y su compra podría rondar el millón de euros, aunque en el caso del lateral no está claro que ésa sea la cuantía total de la compra.

Si el Leganés decide atar sus contrataciones, no es descartable que negocie con sus clubes de origen para reducir el precio de adquisición. Ya sucedió, por ejemplo, con Siovas.

Cedidos con opciones de salir

También están cedidos en el Leganés Lunin, Nyom, Vesga, Óscar Rodríguez, Sabin Merino, Carrillo, Rolan y Michael Santos. El futuro inmediato de alguno de ellos también podría estar comprometido.

Pellegrino reconoció abiertamente que algubo podría retornar a sus clubes precisamente por no estar contando con los minutos que esperaban tener. Por ejemplo, Lunin, sobre el que el Real Madrid duda si repescarlo viendo que no juega. Tampoco están teniendo continuidad Rolan, Santos o Merino.

En el caso de Óscar Rodríguez, también prestado por los blancos, podría haber un cambio de estatus. Es uno de los cuatro sub-23 a los que el club podría hacer ficha del primer equipo para evitar el riesgo de que, al jugar todos juntos, haya riesgo de alineación indebida como ya pasó contra el Alavés.

Los otros tres hombres con ficha del filial son Lunin, Tarín y En Nesyri. A día de hoy, el Leganés solo tiene una ficha profesional libre, pero no se descarta que con las salidas queden más huecos para dar lugar a este cambio federativo.

Renovaciones importantes

La plantilla del Leganés tiene cuatro jugadores en propiedad que terminan contrato el 30 de junio: Mauro dos Santos, Raúl García, Bustinza y Cuéllar. Por ahora no ha trascendido que el Leganés haya iniciado conversaciones para renovar con ninguno de ellos.

Los dos primeros podrían marcharse ya en enero. Mauro dos Santos no cuenta para Pellegrino desde pretemporada y Raúl García contaba hasta que tuvo un “problema personal” (el Flaco dixit) con el entrenador. Después de que en verano se iniciara un proceso frustrado de renovación, no sería descartable que saliera ya.

Los casos de Cuéllar y Bustinza son distintos. El primero quiso irse en verano, pero el club no lo dejó salir. Ahora es titular indiscutible. El Leganés no descarta tratar de renovarlo, algo que el propio Cuéllar solicitó en el inicio del último mercado estival, pero que no logró. Fue, de hecho, uno de sus puntos de fricción con la entidad.

Bustinza, emblema en Butarque y uno de los capitanes del equipo, tampoco ha renovado aún. En verano ya hubo conversaciones, pero apenas fructificaron. El defensa está en una de las franjas salariales más bajas de la plantilla pese a ser un indiscutible del grupo y las alineaciones.

Refuerzos por venir

A todo esto hay que sumar la intención del Leganés de atar nuevas caras. Más allá de nombres, de las oficinas de Butarque trasciende el deseo de potenciar posiciones, sobre todo de jugadores de banda, amén de cubrir posibles vacantes que queden libres tras las salidas de hombres ya en plantilla.