La Real gana por fin en Anoeta en un mal estreno de Cardoso
Los donostiarras dominaron con goles de Oyarzabal y Zurutuza. Los vigués solo reaccionaron al final con un tanto de Maxi Gómez.
La Real de Asier Garitano ya sabe lo que es ganar en el nuevo Anoeta. Lo sabe gracias a su merecida victoria contra un Celta de Vigo que llegaba con Cardoso como nuevo técnico, pero que decepcionó completamente, porque no compareció hasta los minutos finales, cuando se encontró el gol de Maxi Gómez. La victoria debía ser realista y hubiera sido injusto que el Celta se fuera con algo de botín de Anoeta. Oyarzabal y Zurutuza rubricarían la mejor versión vista en casa del técnico de Bergara, una Real que supo jugar a fútbol y que no mereció el sufrimiento final, injustificado e incomprensible. Garitano sigue su crecimiento en Donostia, Cardoso debe mejorar mucho, porque de primeras no mejora al Celta anterior.
La Real salió de inicio a por todas. Sin tonterías. Sin especulación alguna. Quería la primera victoria de la temporada delante su afición. Y ya desde el banquillo se lanzaba un claro aviso a navegantes. Juntar en el mismo once a Zurutuza, Oyarzabal, Juanmi, Willian José y Januzaj quiere decir algo. Y ese algo es que se iba a por la victoria con todo y con todos. El cambio ya empezaba por ahí. Y enfrente, Cardoso en su primer equipo como técnico del Celta hacia lo contrario, porque deshacía una de las parejas más temibles de la liga dejando en el banquillo incomprensiblemente a Maxi Gómez. Ahí radicó la diferencia. En las intenciones iniciales.
Porque la Real salió a presionar arriba, pero también con intensidad. Y con un cambio en su juego, siendo más vertical, con muchos cambios de orientación de banda a banda que desarbolaron a la novedosa defensa del Celta. La primera ocasión clara no tardó en llegar, con Januzaj sacando de la chistera toda su magia, con una jugada por la derecha maravillosa que acabó estrellándose en la cepa del poste de Sergio.
Era el inicio de un acoso y derribo sobre la defensa del Celta, que estaba como noqueado, a pesar de que Cardoso se desgañitaba en la banda para corregir la mala puesta en escena de su equipo. A los vigueses les costaba elaborar algo de fútbol, y solo un desajuste defensivo realista, con un resbalón de Llorente, propició que Iago Aspas se quedara sólo delante de Moyá. Se resbaló en el momento menos oportuno y no pasó nada. Luego el mallorquín sí que tuvo que sacar a relucir sus reflejos con una buena parada abajo a lanzamiento desde la frontal de Emre Mor. Fue un espejismo, porque la Real volvió a tomar el mando del partido y a llegar cada vez con más peligro. Solo le faltaba un poco de acierto en el último pase o en el remate. Porque necesitó de tres disparos casi bajo palos para adelantarse en el marcador. No pudo Januzaj, tampoco Willian José, pero sí Oyarzabal. Era el premio justo a una apuesta valiente y decidida de Garitano. Con 1-0 se llegó al descanso, pero el resultado podía haber sido más abultado.
En la segunda parte, Cardoso cambió su esquema inicial y jugó también a ser valiente, con la entrada de Maxi Gómez. Pero la Real, por si acaso, no quiso probar de esa medicina del nuevo técnico vigués, y a las primeras de cambio, Januzaj (¿quién sino?) se sacó un centro medido a pie cambiado que Zurutuza remató al fondo de la red. La Real ponía tierra de por medio, y 'Zuru' reivindicaba su merecida renovación con un golazo de cabeza que daba brillo a su buen partido. El 'Zuru, Zuru' volvió a escucharse en Anoeta y se cumplía la norma no escrita de que cuando el de Rochefort luce, la Real luce. Pudo haber marcado otro más de cabeza.
Ese 2-0 aniquiló el ansía de empate del Celta, que nunca sabremos hasta donde podía haber llegado, porque enfrente estaban unos realistas para nada dispuestos a ceder su primer triunfo en su renovado hogar. El dominio realista fue incontestable, ante un Celta inoperante, que dejó sensaciones preocupantes y al que Cardoso no logró mejorar con respecto al turco Mohamed. Su carta de presentación fue horrible. Y la Real pudo haber terminado con una goleada de escándalo. Lo único malo, la lesión de Januzaj, al que le dieron por todos los lados mientras repartía su esencia. Y sólo cuando el belga se marchó, reaccionó algo el Celta, que se encontró con un gol de Maxi Gómez a falta de siete minutos que le daba cierta esperanza. También porque la Real había bajado para entonces su nivel de intensidad. Y eso normalmente suele pagarse. Aunque en este caso no fue demasiado caro. Ni hubiera sido Justo.
Cardoso: "El equipo no es mío, es el Celta"
El entrenador del Celta Miguel Cardoso lamentó la derrota de su equipo en Anoeta que le impidió comenzar con buen pie su andadura en el equipo gallego y se enfadó con un periodista cuando le preguntó si estaba satisfecho con el juego de su equipo.
"No me preguntes si estoy contento porque no puedo estarlo con el resultado que hemos tenido", espetó el técnico portugués cuando le preguntaron sobre si tenía buenas sensaciones tras su primer partido en la liga española.
"El equipo no es mío, es el Celta y no se pueden poner responsabilidades cuando he entrenado sólo once veces y menos veces aún con todos los jugadores de la plantilla", repitió incómodo el preparador portugués.
Valoró algunos aspectos del juego de su equipo pero cree que todavía hay un gran margen de mejora porque en algunos momentos no leyeron bien cómo tenían que jugar ante una Real que llegaba fácil al área celtiña.
"No comprendíamos que había que buscar el espacio libre, salimos mal y no supimos salir de la presión. Luego un error nos hizo encajar un gol y eso pesó mucho", resumió Cardoso que vio sin embargo motivos para la esperanza en la segunda mitad aunque el segundo gol de la Real hiciera mucho daño.
Habló de Maxi Gömez, suplente en el primer tiempo y revulsivo tras el descanso, valoró lo que significa el delantero uruguayo y adelantó que probablemente será titular la próxima jornada, aunque advirtió a su plantilla que sus alineaciones se hacen "en función de como entrenan durante la semana y los que tengan más condiciones serán los que jueguen".
Garitano: "Nos hemos sacado una espina que teníamos clavada"
El entrenador de la Real Sociedad, Asier Garitano, se mostró muy satisfecho con el rendimiento de su equipo ante el Celta y, sobre todo, con el primer triunfo en Anoeta de la temporada, que, como reconoció, tanto para él como para su plantilla sirvió para "sacarse una espina" que tenían clavada.
"Hemos hecho un partido muy completo pero no hemos ganado dos o tres cero porque el Celta es un equipo completo y es muy bueno, aunque tampoco le hayamos dado oportunidades para ello", declaró tras el encuentro el preparador realista.
Garitano reconoció que este resultado dará tranquilidad a sus jugadores, que ahora tendrán más confianza al sumar "dos victorias seguidas y conseguir el triunfo en casa", aunque él pasa ya página y quiere pensar en el próximo partido.
El técnico de la Real restó importancia a que con las dos últimas victorias los blanquiazules queden a un sólo punto de Europa, aunque sí reiteró la importancia de haber ganado por fin en San Sebastián porque "no era normal sacar tantos puntos fuera y no sacarlos en Anoeta, no había explicación".
Informó también de que el belga Adnan Januzaj, retirado del terreno por lesión en el segundo tiempo, no tiene nada importante y que cuenta con él para jugar la próxima jornada.
Se felicitó además por haber recuperado a jugadores como Mikel Merino o Joseba Zaldua, con los que no había podido contar en el último mes.
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
---|
Próximos partidos |
---|
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
---|
Próximos partidos |
---|