NUMANCIA 1 - RAYO MAJADAHONDA 2
Iza y Aitor García dan la segunda victoria del Rayo a domicilio
El Rayo Majadahonda logra la segunda victoria a domicilio a costa de un Numancia indolente. Los de Iriondo fueron claros vencedores.
El Numancia cayó derrotado por cero a dos ante un Rayo Majadahonda claramente superior y con un sistema fiable en Los Pajaritos. El planteamiento de Iriondo ante los sorianos dio frutos en la primera mitad. Los visitantes saben del esfuerzo físico que deben realizar, sobre todo cuando pierden el balón defendiendo todos e incluso encimando dos jugadores al que lleve el balón. Lo cierto es que los rojillos no dispararon a puerta en esta primera mitad. Acercamientos sin más y remates altos de cabeza de Atienza o Diamanká. Oscar y Enzo dominaban el centro del campo, adelantándose a los pases y distribuyendo el juego. A los quince minutos, una buena internada de Benito sirvió para marcharse de Luis Valcare, éste lo derribó en el área con el pertinente penalti que transformó Iza. El ataque del Numancia se limitaba a la banda de Oyarzun quien centró en varias ocasiones pero sin encontrar rematador. La banda de Mateu era previsible. El interior zurdo del Numancia siempre buscaba la diagonal, adelantándose Varela. La presión que realizó el Rayo Majadahonda al jugador del Numancia que llevaba el balón era intensa, un claro ejemplo fue ver como Andújar salió hasta el centro del campo acompañando a Oyarzun. Benito y Varela eran dos balas buscando siempre el carril, al igual que los dos delanteros quienes esprintaban al área de Juan Carlos. Con el cero a uno en el marcador se llegó al descanso.
En la reanudación similares planteamientos si bien López Garai dio entrada a Medina por Luis Valcarce. El Numancia se acercaba más a la portería del Rayo, pero nada. Para que te toque la lotería primero hay que comprar el décimo. Para marcar gol hay que tirar a puerta y los locales hicieron el primer tiro a Basilio en el minuto 65 por mediación de Oyarzun. En estas, Diamanká falló lo imposible. En línea de gol, sin el portero y sólo mandó el balón por encima de la portería, lo más difícil. Los carrileros del Rayo Majadahonda ya no podían subir con la velocidad de la primer parte, el equipo de Iriondo esperaba a salir rápido a las contras y así llegó el segundo. Un pase largo de la defensa no fue frenado por Kako, Airtor Ruibal se fue al área y cedió a su tocayo García para establecer el segundo. A partir de ahí un Numancia incapaz de ver puerta, ni siquiera Viguera de penalti salvo el rechace que logró Villalba.