El Zaragoza remonta y sonríe a costa de un Nàstic horroroso
Fali adelantó a los grana en el 4', pero los tantos de Djetei (pp.), Biel y Álvaro (grave error previo de Javi Jiménez) dieron el primer triunfo a Alcaraz.
EI Real Zaragoza de Alcaraz ya sabe qué es ganar. Y lo hizo a costa de un Nàstic endeble y que acusó su falta de fútbol. Djetei, en propia portería, Pep Biel y Álvaro remontaron el tanto tempranero de Fali. Los aragoneses sacan la cabeza del descenso y los grana sigue en caída libre y sin reacción. Preocupa y mucho.
Enrique Martín y Alcaraz revolucionaron sus equipos titulares y el Real Zaragoza, que además presentó por primera vez esta temporada un 5-3-2, demostró salir a verlas venir. Y de ahí que solo tardara cuatro minutos en tener que remar contracorriente porque Fali bailó a Verdasca dentro del área y cabeceó sin oposición un córner servido por Javi Márquez. El tanto, lejos de espolear al conjunto grana lo adormiló y se olvidó de hacer correr el balón. Se obsesionó con lanzar balonazos a Del Moral y Suárez que no pudieron controlar ninguno. Con el paso de los minutos, con Pombo y Javi Ros a la cabeza, el Real Zaragoza se fue adueñando de la posesión y obligó a colgarse del palo a un conjunto grana que bastante hacía con achicar agua. Fue un monólogo aragonés y, en el 32', llegó el 1-1. Djetei, que llevaba tres jornadas sin jugar, se hizo un gol en propia portería. Becerra se apresuró en comentar que no fue culpa suya, pero lo cierto es que se veía venir porque el Nàstic acumuló méritos durante muchos minutos para ser castigado. Con el empate, el conjunto de Alcaraz olió a sangre, pero se olvidó de morder y el Nàstic agradeció llegar al descanso sin sufrir.
Ya en la segunda mitad, el conjunto grana salió parsimonioso y el Real Zaragoza lo aprovechó para campar a sus anchas. Eso sí, el gol de la remontada llegó gracias al balón parado. Pep Biel, que debutó en Liga, demostró tener un guante en su zurda y marcó de falta directa. Con el 1-2, Enrique dio entrada a Barreiro y pasó al 4-4-2 pero, no mereció más. Y la puntilla, el 1-3 de Álvaro tras el error de Jiménez.
