El Barça sana sin Messi y el Real Madrid sigue en la UVI
Rafinha disimuló la baja del crack. Lío de laterales para Lopetegui. El Madrid llega sin tino: necesita 13 tiros para hacer gol. Ter Stegen, Alba y Arthur tiran del carro; Piqué y Suárez mejoran.
Messi es líder de la Liga en asistencias, participación en ataques de gol, disparos totales y a puerta, remates al poste, pases de finalización (los que superan una línea de tres o más rivales) y pases al área. Y también es el segundo goleador del torneo y el pichichi de los dos anteriores. El tamaño de su influencia (participa en el 65% de los goles culés en Liga) se corresponde con el de su ausencia en el Clásico. Pero sin él brilló el Barça ante el Inter, aunque necesitó 15 tiros para hacer dos goles, desde el funcionamiento colectivo.
Al otro lado, el paso del Viktoria Plzen por el Bernabéu no tuvo influencia medioambiental. Ganó el Madrid con datos peores de los que presentó en su derrota con el Levante: tres disparos menos a puerta, 13 menos en total, dos puntos menos de posesión, cuatro tiros más concedidos… Cambió el resultado pero no la condición interina de Lopetegui. La pitada final al equipo dejó las cosas como estaban.
El Madrid ha metido tres goles en sus últimos seis partidos y dos de ellos son atribuibles a un defensa, Marcelo. El equipo necesita casi 13 remates para hacer gol. El de Benzema ante el Viktoria fue el primero desde el 1 de septiembre. Bale no anota desde el 19 y Asensio desde el 22, al Espanyol, su única diana del curso. El paso que le abrió la salida de Cristiano empieza a cerrársele. Más con el regreso de Isco, aunque le pesan las tres semanas de inactividad. Fue sustituido antes de la hora de juego ante Viktoria y las cámaras le captaron susurrándole algo al técnico. Se interpretó como un reproche.
Pero el problema es capicúa. La defensa le ha dado al Madrid el 30% de los goles, pero ha fallado mucho en su papel. Cualquiera de los dos porteros (asunto cerrado en falso) supera la media de un gol encajado por partido y el último dato que consta en el registro es preocupante: el Viktoria, equipo número 48 del ranking UEFA, tiró diez veces en el Bernabéu. En Barcelona faltarán Carvajal y quién sabe si Marcelo. Odriozola fue sustituido ante el Levante y relevado de funciones ante los checos; Lucas Vázquez, que hizo el papel, descuidó su banda; Varane y Ramos están por volver del Mundial… Todo apunta a que si Marcelo está disponible, Nacho será el lateral derecho.
Un Barcelona al alza
El Barça, con mejores números, tiene sombras. Messi y Ter Stegen, séptimo portero en paradas de la Liga, lo que habla mal de sus protectores, son factores de corrección en un equipo en el que todo ha funcionado, hasta ahora, peor que el curso pasado. Piqué lidera el ránking de errores de gol por partido pero inicia la rehabilitación, Dembélé anda entre pitado y señalado, Vidal ejerce de pirómano, Vermaelen sigue lesionándose, Malcom ha jugado 25 minutos, Busquets flojea y Umtiti está KO. Pero muy al alza andan Arthur, centro de gravedad del equipo, y Jordi Alba, que sigue destapando a Luis Enrique. Y Rafinha disimuló bien la baja de Messi. Luis Suárez, con menos gol, ayuda. Y Coutinho mejora. Pinta que los once que anoche superaron al Inter repetirán. Las dos victorias consecutivas exculpan a Valverde. Y en al palco llegan empatados. Florentino pinchó en las encuestas y Bartomeu en la asamblea. También ellos necesitan ganar.