Las cuentas pendientes de Eusebio con la Real Sociedad
El técnico del Girona regresa a San Sebastián, donde dejó algunos asuntos que se pueden saldar en el partido de la Real Sociedad contra su actual equipo.
Eusebio Sacristán vuelve a Anoeta este lunes para jugar contra el Girona. Lo hace después de salir a finales de la pasada temporada por la puerta de atrás de una Real Sociedad a la que un año antes había clasificado para jugar en competición europea. Pero también vuelve con algunas cuentas pendientes que pueden quedar saldadas en ese enfrentamiento.
En general, el entrenador vallisoletano dejó un buen recuerdo entre la afición realista, así que se espera que se le tribute un recibimiento cordial. Pero eso no quita para que haya varias cuestiones encima de la mesa que desgastaron en exceso su figura en el tiempo en el que fue entrenador de la Real Sociedad.
Lo que más le achacó la afición de la Real fue el escaso protagonismo que otortgó a un jugador de la talla de Ruben Pardo. "Teniendo delante a jugadores como Illarramendi y Zurutuza es complicado que juegue. Su problema es que hay otros compañeros que lo están haciendo mejor o que para mí están por delante", se explicaba Eusebio. Pero a la afición no le terminaban de convencer sus explicaciones. El riojano ha cambiado su situación con Asier Garitano, y llega a la vuelta de Eusebio como un jugador con bastante protagonismo. Así que no es de extrañar que Pardo salga con una motivación especial para demostrarle a Eusebio que se equivocó, porque lo relegó al ostracismo, llegando a tener que salir cedido en la primera temporada con el vallisoletano. Otro jugador que también querrá demostrarle que se equivocó es Jon Bautista, al que le dio menos oportunidades en ataque que lo que sus porcentaje de goles por minutos jugados indica.
A partir de ahí, habrá que ver con qué sistema juega Eusebio con su Girona en Anoeta. Cuando estaba en la Real su estilo de toque de balón y posesión era innegociable, hasta el punto de enrocarse tanto en esa idea que le acabó costando la destitución, al no ser capaz de cambiar su forma de juego en busca de un cambio en los resultados. Pero ahora con el Girona, en estas ocho primeras jornadas, ha sido capaz de cambiar su 4-3-3- al 3-5-2 que hereda de Machín con esos jugadores para poder tener mejores resultados. Dice el de la Seca que está en proceso de convencer a los jugadores de su idea de juego, pero lo cierto es que ha cambiado de que su idea es innegociable a que debe adaptarse a los jugadores que tiene. Anoeta espera ansiosa a ver qué Eusebio se presenta en su vuelta a la que su casa las dos últimas temporadas. Son sus cuentas pendientes con la Real Sociedad.
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