GIRONA
Los penaltis, una pena máxima para el Girona
El conjunto rojiblanco ya lleva cuatro en contra esta temporada, el que más de LaLiga. Desde que ascendió a Primera le han señalado nueve: ocho marcados y solo uno fallado.
El Girona no está teniendo fortuna con los penaltis en este arranque liguero. El VAR fue clave en la señalización de una pena máxima en el pasado encuentro ante el Eibar y en lo que se lleva de campaña ya le han señalado cuatro, y es el equipo con más penaltis en contra esta Liga. Se trata de un dato preocupante porque conlleva que muchos de los partidos disputados hasta ahora se pongan cuesta arriba y más teniendo en cuenta que a Bono no se le puede considerar un para penaltis. Tampoco a Gorka Iraizoz, su sustituto. Y los números así lo constatan porque desde que el conjunto gerundense ascendió a Primera, está inmerso en su segundo curso, le han señalado nueve penaltis. Y el balance es desastroso: ocho marcados y solo uno fallado (Jorge Molina).
La idea de Eusebio Sacristán es tratar de defender con la línea defensiva alejada del área, pero ello no significa que se consiga. En muchos momentos del partido, el conjunto rojiblanco es obligado por el rival a colgarse del palo y un ejemplo claro fueron los primeros minutos del partido ante el Eibar. Antes del penalti que señaló el VAR por manos de Aday, el conjunto armero también protestó unas manos de Muniesa tras un cabezazo de Sergi Enrich que se quedó sin castigo. La concentración es clave en este tipo de acciones y sin duda, controlar las infracciones dentro del área es un aspecto a corregir porque perjudican mucho al Girona. Solo un penalti de los nueve a los que se han tenido que enfrentar ha sido fallado. Toca evitarlos.
Cara B. Y si los penaltis en contra son una calamidad para el Girona, los que son a favor son una bendición. Y todo porque cuentan con un especialista en este aspecto: Stuani. El uruguayo es el jugador en activo que más goles de pena máxima seguidos ha logrado en LaLiga. En dos temporadas con el Girona lleva seis penaltis seguidos transformados y si los sumamos a su pasado en Racing y Espanyol la cifra se eleva hasta los 12. Un valor seguro.