La circulación de balón es el talón de Aquiles grana
Es el equipo de Segunda con menos pases buenos (1.411). Los motivos podría ser el agotamiento de los jugadores y el excesivo juego en largo.
El Nàstic de José Antonio Gordillo busca ser un equipo competitivo, pero en este arranque de Liga le está faltando claridad con el balón. El excesivo juego en largo que demuestra y el preocupante agotamiento del centro del campo en las segundas mitades serían algunos de los motivos. Y ello repercute en la cantidad de pases buenos que se dan en los partidos. Tal es así, que el Nàstic es el conjunto que menos pases buenos ha dado en las siete primeras jornadas de Liga con solo 1.411. Las comparaciones son odiosas, pero el Rayo Majadahonda, equipo que también pugna por la permanencia, suma el doble (2.824).
La afición del Nàstic no está descontenta con el trabajo que muestran sus jugadores, pero sí considera que pueden ofrecer un mejor fútbol dado que cuentan con futbolistas de mucha calidad como Rocha, Javi Márquez y Albentosa, que pueden trasladar el balón al ataque con acierto. Gordillo quiere dar con la tecla ganadora y de momento, está haciendo hincapié en que deben mejorar en la circulación de balón. Es vital porque además, solo el 70 por ciento de sus pases son buenos. Sin duda, es uno de los puntos flacos de este Nàstic.
Posesión
El Nàstic ha sido incapaz de erigirse protagonista en ninguno de los siete partidos que ha disputado hasta la fecha. El conjunto grana no ha ganado la posesión a ningún rival este curso e incluso se vio claramente superado por Las Palmas, que le dejó con tan solo un 23,2 por ciento de posesión. Perdieron 2-0 con claridad. Eso sí, el consuelo que le puede quedar al conjunto grana es que tampoco necesita tener más controlado el balón que el adversario para poder ganar algún encuentro porque Osasuna le dejó con solo un 38 por ciento de posesión en el Nou Estadi y los tarraconense acabaron sumando los tres puntos gracias al tanto que firmó Manu del Moral (1-0).