Valverde habló sólo 10 minutos; Messi se quedó en el gimnasio
El entrenador mantuvo charlas privadas con algunos de los futbolistas que fueron titulares en Leganés, entre ellos Coutinho, Sergi Roberto...
Menos de doce horas después de aterrizar en Barcelona tras un silencioso viaje en avión desde Madrid, los jugadores del Barça se volvieron a ver las caras en el vestuario local de la Ciutat Esportiva. Rostros largos, pocas ganas de hablar y la sensación de que “el equipo tiene que reaccionar sí o sí”. Perder en casa del colista hizo daño y en el Camp Nou saben que estamos a finales de septiembre y que queda mucho, pero menos faltaría “de no haber dejado escapar cinco puntos en tres días”.
Ernesto Valverde no es partidario de largas charlas tras las grandes derrotas. Hoy tuvo una de apenas diez minutos antes del inicio de la sesión. La pasada temporada, tras la ridícula eliminación de Champions en Roma en la ronda de cuartos no se dirigió el día siguiente al equipo. Ayer varió. Pretende que el colectivo reflexione, que “cada uno haga autocrítica” y luego ya se verá si hace falta mantener una reunión de vestuario.
Fuentes del club aseguraron a AS que fueron los jugadores “lo que decidieron adelantar una hora la sesión; estaba programada para las 12:00 y finalmente se encontraron a las 11:00. “Hay que saber competir siempre. Si no lo pones todo, malo”, indicaron desde la Ciutat Esportiva, mientras que otra voz apoyaba a los futbolistas: “Hay momentos que crees que lo tienes controlado, te meten dos goles en un minuto, algo que no acostumbra a pasar, y luego ponte a remar sin espacios”. Hay espacio para todos. Valverde mantuvo conversaciones privadas con algunos de los titulares ayer, entre ellos Philippe Coutinho, Sergi Roberto o Samuel Umtiti.
Lionel Messi, afectado por la derrota, no salió a ejercitarse, aunque estuvo informado de todo. Se quedó en el gimnasio recibiendo una sesión de fisioterapia. Dicen que es algo habitual en él. Charla con los compañeros y pide que le hagan un masaje para tonificar los exigidos músculos.
“El equipo se ejercitó muy bien, con muy buen intensidad el martes, en la previa del partido, pero a diferencia de otros días no hubo una preparación exclusiva de nada en concreto, como siempre se hace”, apuntan desde el vestuario. “Posiblemente sea porque el equipo venía de jugar el domingo ante el Girona y el entrenador creyó que todo estaría en orden, pero la verdad es que no se hizo nada especial”, indican.
