1x1 del Atleti: Borja Garcés le vuelve a dar la razón a Simeone
El canterano anotó el empate sobre el tiempo. El Metropolitano había discutido el cambio, cuando el de Melilla había ocupado el lugar de Rodrigo.
Oblak. Poco hubiera podido hacer en el zambombazo de Cote en el 8’. El misil del defensa visitante se estrelló, por fortuna para el esloveno, en la escuadra. Lo mismo en el 65’ cuando el que la enganchó fue Arbilla con el mismo resultado. La suerte no le acompañó en el gol del Eibar. Tocó el centro de De Blasis, pero el rebote se lo quedó Enrich.
Juanfran. El Eibar se parapetó en el centro y sacó menos partido por fuera del debido durante la primera mitad, sobre todo a causa de varios centros sin receptor una vez ganada la zona de ataque. Le faltaba algo para culminar. Después se desordenó bastante en el correcalles del 60’ al 75’, teniendo incluso Filipe que venir a cerrar a su costado en una contra peligrosísima del Eibar.
Giménez. Sólido, aunque en algún momento le faltó algo de toque rápido y fácil en la salida. Cargó bien en el área del Eibar, ganando varios balones aéreos, pero sus remates no tuvieron premio. Ni primero Charles, ni después Enrich le inquietaron, aunque al final el último terminó decidiendo el partido.
Godín. Se equivocó en el 86’, con tan mala suerte de que su pérdida de salida terminó en el gol del Eibar. Hasta entonces había estado bastante bien. Se atrevió con una salida a campo rival que terminó en un pase que dejó a Griezmann ante Dmitrovic. Iba a ser suplente, pero la baja de última hora de Lucas le propició un sitio en el once. Pudo abrir el marcador al ganar un balón en el área por arriba, pero se volvió a topar con el portero del Eibar. Después fue el larguero el que evitó su empate. Pese a ese error, no estuvo mal.
Filipe Luis. Tímido, sin mucho recorrido en el primer acto y con poca confianza en campo rival. Tener a Lemar delante por ese costado tampoco invitaba a irse alegremente al ataque, más pendiente de no descubrirse que de amenazar. Con Koke cerca se fue atreviendo más, aunque le faltó algo de precisión. Deprimido.
Koke. Poco peso por la derecha, buscó a Costa varias veces sin llegar a conectar. Fue mejorando, curiosamente, tras la salida de Lemar del campo, aunque antes ya había tenido una ocasión imperdonable. Se filtró bien entre los centrales del Eibar y, en el área pequeña, llegó a un balón enviado por Costa que falló sorprendentemente. Después sí encontró muy bien al delantero hispanobrasileño al espacio y fue Dmitrovic el que negó el gol a Diego Costa. Demasiado intermitente.
Rodrigo. Mendilibar trató de relantizar la salida del Atlético teniendo a Jordán muy pendiente del inicio del mediocentro. Le costó arrancar ante un rival con, además, acumulación de tráfico en la franja central, pero se fue haciendo importante con el paso de los minutos. Ayudó mucho en el agobio del principio de la segunda parte, recuperando en campo rival y controlando el intento de salida del Eibar. En el 69’, además, dejó un detallazo con un pase de 25 metros que dejó a Griezmann ante Dmitrovic, al más puro estilo Gabi. Fue sustituido y el cambio no gustó al Metropolitano.
Saúl. No había aparecido hasta un córner sacado en el 20’ por Lemar que cabeceó de forma espectacular a gol, no fue menos la respuesta de Dmitrovic. Fue creciendo, pero sin la llegada que ha exhibido con la Selección.
Lemar. Más relevante a balón parado que a juego corrido durante el primer acto. Se le vio poco dividir y asociarse por el centro. En el 37’ se entendió bien con Griezmann y no llegó a marcar por poco. Alguna pérdida de más y, sobre todo, falta de atención en la marca parecía que acabarían llevándole al banquillo. Y así fue, abandonó el campo a la hora de partido.
Griezmann. En el 13’ sacó a su equipo del tedio con una maniobra escorada en el área. Quebró a Arbilla y estrelló el remate a Dmitrovic. En el 37’ buscó a Lemar con un pase con mucha intención que Rubén Peña llegó a despejar con la punta de la bota. Lo mejor del Atlético iba saliendo de sus botas como la conducción y pase a Lemar en el 47’ que después no acertó a rematar Costa. Fue a menos en la parte final.
Diego Costa. Buscó con obsesión plantarse ante Dmitrovic con un buen ramillete de desmarques en la primera mitad, pero sus compañeros no sintonizaron con él. Bien en el apoyo a Griezmann, generando para segundas jugadas. En el 47’ tuvo una clara, pero no acertó a cazar un balón muerto en el área pequeña. A renglón seguido le metió una pelota de gol a Koke, que el vallecano, incomprensiblemente, no pudo empujar a la red. El medio se la devolvió en el 68’, y Dmitrovic volvió a lucirse ante Costa. Buena versión, pero aún sin gol.
Correa. Salió por Lemar para incrustarse en la banda derecha y dejarle a Koke el sector izquierdo. Simeone quería verticalidad y velocidad ante un Eibar que salía cada vez menos. Poco del argentino hasta que ganó esa pelota por la derecha que terminó convirtiendo en asistencia para el empate de Borja Garcés.
Borja Garcés. En pleno toque de carga de caballería atlética, Simeone retiró a Rodrigo para meter al joven delantero en busca del gol que le negaba Dmitrovic y acertó.. Al poco se salir jugó bien con el cuerpo y ganó una pelota que le dejó peligrosamente a Griezmann. En el 89’ pudo empatar, pero Arbilla sacó su remate en el área pequeña. No perdonó sobre el tiempo. El melillense recibió de Correa y remató a la red. Movimientos y gestos que recuerdan, salvando las distancias, a Fernando Torres.
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