Jenni Hermoso: "El City es muy físico, pero jugaremos de tú a tú"

-Volvió al Atleti, donde comenzó. ¿Cuántos años tenía?

-Cuando empecé en las escuelas, 12. Después cuando debuté con el primer equipo, 16.

-Y usted no sólo fue una de las chicas de L'Estartit. Es que el gol que subió a Primera al Atlético allí lo marcó usted...

-Siempre será uno de los recuerdos de mi vida. Minuto 88, íbamos perdiendo y con un empate nos valía. El gol fue de córner, un churro, pero el empate, subir a Primera. Buah, buah. Espectacular.

-¿Recuerda aquel viaje a Gerona? ¿Los nervios?

-Yo era la más pequeña. Tenía 16 años. Había subido hacía poquito. Más que el viaje recuerdo la tensión del partido. Ir perdiendo casi todo el tiempo. Con tanto que nos jugábamos.

-¿Qué edad tenía cuándo se fue del Atleti?

-19 o 20, al Rayo.

-¿Había vuelto por el Cerro en este tiempo?

-A jugar.

-Ocho años después regresa para quedarse. Cómo ha cambiado el equipo.

-Mucho. Se ha hecho mucho, mucho trabajo para estar hoy así. Ser campeonas de Copa, de Liga dos años... Las cosas a nivel interno se han cambiado para llevar al club donde está.

-¿Qué cosas?

-La ropa, los viajes, los campos. Todo se ha profesionalizado.

-Desde hace dos temporadas ya no entrenan por las tardes sino por las mañanas, como los hombres.

-Sí, eso es, por ejemplo.

-¿Pensaba que volvería algún día?

-Eso siempre se tiene en mente. Volver a tu antigua casa. Lo que no sabía era cuándo.

-Jugó en Suecia (2013), en el PSG (2017-18). ¿Nota que el Atlético Femenino tienen nombre fuera? ¿Se le conoce?

-Sí, está claro. A un equipo dos veces campeón de Liga Iberdrola se le tiene que conocer. En Francia siempre me decían: "Se habla mucho del Barça, pero... ¡si gana siempre el Atleti!".

-Dice que su abuelo fue clave para que usted sea futbolista, ¿por qué?

-Yo jugaba de pequeña. Mi abuelo tenía un parquecito que hay en su casa y allí jugaba con niños. Un día me vio un entrenador y me llevó a las pruebas del Atlético. Me acuerdo mucho de aquello. Y de mi padre y todos los viajes que se hacía por llevarme a entrenar, lloviendo, granizando, daba igual.

-Con el regreso al Atleti también ha vuelto a la Liga. ¿Nota cómo ha crecido?

-Sí. Se nota mucha competencia en los equipos. Que alguien nos respalde por detrás y nos ayude es muy importante.

-¿Se está ya cerca de lo que hay fuera o aún queda?

-Nos queda un poquito, pero ya casi, casi estamos igualados con el resto de ligas extranjeras. Quizá son más fuertes y más potentes pero el Atleti va por ese camino. Poco a poco.

-¿Cómo fue el fichaje?

-Complicado. Cuando ya decidí no seguir en el PSG valoré opciones y apareció el Atleti: he vuelto con muchas ganas de hacer cosas grandes.

-La primera, quizá, hoy: se enfrentan en Champions al City, ¿cómo ve la eliminatoria?

-Es muy complicada. El City es el mejor equipo de la liga inglesa. Es muy físico, aprieta mucho. Nosotras salimos en casa y hemos entrenado mucho defensivamente para que no nos vayamos a la vuelta con un resultado muy abultado. Pero sin perder nuestra esencia, sino siendo nosotras y jugarles de tú a tú.

-¿Cómo espera la grada del Cerro?

-Confío en que se llene. La he tenido en contra, cuando vine a jugar aquí, y ahora que puedo estar con ella, que he vuelto, espero que sean muchos y que me animen a mí, a nosotras. Su apoyo es fundamental. Empujan mucho.

-José Luis Sánchez Vera. ¿Qué supone para usted que él sea el entrenador?

-José para mí es un seguro. Es una suerte que él nos entrene, es la persona ideal. Poder aprender de él, de todo lo que sabe, es una de las mejores cosas que me pueden pasar este año.

-¿Recuerda a Amanda de cuando usted estaba en el Atleti o ella era muy pequeña aún?

-Lo era (ríe). No llegué a jugar con ella, pero la recuerdo de entonces, siempre con su tupé.

-Se fueron Sonia y Marta Corredera, pero llegó usted, el fichaje. ¿Siente presión?

-Yo no llegué para suplir a otras que se han ido sino para aportar al equipo, aportar cosas buenas, y que el Atlético siga haciendo historia. Cada jugadora es importante. Todas somos buenas porque estamos bien rodeadas. Yo vengo como Jenni Hermoso pero soy sólo una más de eso, de un equipo.

-Fue pichichi dos años pero siempre dice que su especialidad no es el gol.

-Sí, fui pichichi dos veces, pero quizá porque jugaba en un equipo con mucha llegada o porque mi posición estaba más adelantada o porque una fuerza divina o yo qué sé me mandaría la cosa de meter tantos goles (ríe) pero a mí me gusta más darlos que meterlos. Jugar entre líneas, combinar.

-¿Con qué jugadora del Atleti siente más afinidad en el campo?

-Creo que con Esther combino, que voy a conectar muy bien con ella.

-En Suecia, en el Tyreso, compartió vestuario con Vero Boquete y con Marta...

-Siempre digo que compartir vestuario con Marta ha sido una de las mejores cosas que me han pasado en el vida. Lo que aprendí de ella, compartiendo entrenamientos, campo. Y con Caroline Seger y Christen Press. He ido poco a poco creciendo gracias a que he tenido compañeras así. Eso es lo que me ha llevado a ser lo que hoy soy. Aprender de ellas.

-Usted es la Dj de todos los vestuarios por los que pasa. ¿En Suecia logró que calara 'Camela'?

-(Ríe) No, no. Allí no llegaron a entenderlo (ríe de nuevo).

-¿En el Atleti también lo es?

-Sí, sí. Yo soy la Dj residente y luego tengo Dj invitadas. Entre todas vamos haciendo una lista de Spotify.

-¿Una canción que últimamente nunca le falta?

-Dieciocho, de Dani Martín. Me resulta especial, me da feeling.

-¿En el PSG coincidió alguna vez con Neymar?

-No, no, nunca los hemos visto. Nosotras no entrenábamos en el mismo sitio. Fuimos a verles partidos, pero nada más.

-¿Al Khelaifi, invierte también en la sección femenina como en la masculina?

-Sí, sí, está aportando mucho. El año pasado el PSG fue el equipo que más presupuesto tenía y eso es algo que te va a ayudar sí o sí. Entonces no jugó Champions pero éste sí. Será un equipo muy fuerte.

-¿Ha cambiado la mentalidad sobre el fútbol femenino? ¿Nota que ya se acepta como algo normal: que las mujeres jueguen, como los hombres?

-Sí. Ha cambiado mucho. Ahora hay muy poca gente que nos diga algo. Y si la hay es gente que se ha quedado anticuada. Ahora para las niñas somos sus ídolos. Se nota. Fíjate, yo, cuando empecé a jugar, mi ídolo era Nervi, una jugadora del Atlético. Y a la gente le resultaba raro que no fuera un chico, pero es que era así. Yo quería ser como Nervi. Ahora noto que las niñas que vienen tienen más conciencia de nosotras. Nos piden autógrafos, fotos, y no sabes cómo emociona eso. Para ti es una captura, un instante, para ellas un recuerdo imborrable. Creo que eso nos hace mejores personas.

-¿Usted puede vivir ya solo del fútbol?

-Sí, básicamente, a día de hoy sí.

-Dice Simon Critchley, filósofo y enamorado del Liverpool, que el futuro del fútbol es femenino. ¿Está de acuerdo?

-Queda bastante. Está en el camino, y caminando muy bien. Pero no queremos correr. Queremos hacer las cosas despacio y bien, para que sean buenas, bien de verdad.