Cerrar los partidos antes del minuto 85, una obligación para el Cádiz

Esta temporada, el Cádiz ha recibido dos goles claves a partir del minuto 85. No es la primera vez que le ocurre al equipo de Cervera, que ya ha encajado 14 así. Faceta a cambiar.

Actualizado a 9 de septiembre de 2018 14:21 CEST

Álvaro Rivero

Si algo caracteriza a los equipos de Álvaro Cervera, y más concretamente al Cádiz en el que lleva trabajando más de dos años, es la solidez defensiva. Hacerle gol al equipo amarillo es una tarea altamente complicada por su manera de defender, y es que en los 108 partidos oficiales que el entrenador natural de Guinea lleva dirigidos, tanto en Segunda B como en Segunda División, el Cádiz ha encajado 89 goles.

Dentro de la dificultad que supone perforar la portería de un Alberto Cifuentes que sigue a un gran nivel, de los 89 goles recibidos, 14 de ellos han sido a partir del minuto 85 de partido, dejando normalmente una pérdida considerable de puntos, sobre todo la pasada temporada. Esta campaña, dos de los tres goles encajados han sido en los últimos suspiros y han supuesto la pérdida de tres puntos en total. Faceta a mejorar.

En la primera temporada en Segunda tras el retorno, el equipo gaditano sufrió varios varapalos en los minutos finales. Juanma Delgado (UCAM) hizo el 2-2 en Carranza en el descuento, Jorge Molina (Getafe) anotó desde el punto de penalti en el 93 para quedarse con la victoria por 3-2 en el Coliseum y Amath (Tenerife), en el 86, dejó congelado Carranza. Fueron tres de los goles que más daños hicieron a aquel Cádiz. Siete tantos a partir del 85 que no le impidieron jugar el playoff.

Un curso después, la escuadra amarilla solo encajó cinco tantos en los minutos finales, pero tres goles de esos fueron cruciales para que no jugara la fase de ascenso a Primera. Aridai (Cultural) terminó de aguar un 2-0 en Carranza, pero los goles más dolorosos volvieron a ser del Tenerife. En el Heliodoro, Juan Villar marcó el empate en el 88, y en Carranza, Malbasic desde fuera del área complicó las opciones de playoff en el 92. Era la penúltima jornada y este despiste defensivo costó caro.

Ya en la presente temporada y, además, en las dos últimas jornadas, el Cádiz ha encajado dos goles en los minutos finales que le ha costado bastante caro. Sobre todo, han dolido. La semana pasada, en Carranza ante el Real Oviedo, Tejera aprovechaba un balón muerto en el área en el 93 para enviarla al fondo de la portería tras tocar en Álex y hacer el empate. El viernes, en Mallorca, Álex López anotaba en un córner cuando el crono marcaba el 89 para poner el 1-0.

Dos goles que pueden ser el claro reflejo de que el equipo cadista no está sabiendo llevar la filosofía que Álvaro Cervera persigue desde el banquillo. Dos goles que a buen seguro harán tomar decisiones de cara a futuras jornadas, como ya ha ocurrido en otras ocasiones, ya que dentro de la manera de jugar y afrontar los partidos es un peligro constante no saber cerrar los partidos a esas alturas del encuentro. Sin duda, una prioridad en la lista de tareas pendientes.