Lunin: “¿Cláusula del miedo? Eso es política, mi deber es jugar”
El portero ucraniano cedido por el Madrid ha sido presentado con mucha expectación. “En este mes y medio he comprendido que la oportunidad del Leganés era buena”.
Andriy Lunin ha vivido en apenas mes y medio dos presentaciones. Una, en el palco de honor del Bernabéu. La segunda, la de hoy, en la modesta y recién inaugurada sala de prensa de la Instalación Deportiva Butarque. Aquí entrena su nuevo equipo, el Leganés. Más sencilla que el espacio en el que el portero ucraniano se dio a conocer como madridista, la estancia se ha quedado pequeña entre cámaras, periodistas e incluso directivos. En todo el verano ningún refuerzo pepinero ha levantado tanto revuelo. Normal. No todos los días arriba al sur de la capital el que está llamado a ser futuro portero del Real Madrid.
Pero eso será más adelante. Dice Lunin, de apenas 19 añitos, que él sólo piensa en el presente. En el aquí. En el ahora. En un Leganés que, casualidad del calendario, tendrá como siguiente rival al propio Real Madrid en ese mismo Santiago Bernabéu en el que fue presentado hace no mucho. El sábado, sin embargo, no jugará. Su contrato de préstamo incluye una cláusula del miedo que le impide competir contra el equipo que le ha cedido.
“Esto [lo de la cláusula del miedo] es una cuestión de política. No sé si yo puedo valorar estas cosas. Mi deber y mis obligaciones son ser un buen jugador y hacer todo para ayudar al equipo. Nada más”, ha despejado en largo el guardameta, hábil entre palos y con el micro en la mano.
Lo ha demostrado por segunda vez cuando le han cuestionado por el mercado. Por madridistas que podrían acompañarlo en esta aventura por Butarque. Marcos Llorente o Borja Mayoral son hombres que Pellegrino ha reconocido que gustan al Lega.
“El Leganés un club que todos respetan. No sólo en el vestuario del Real Madrid, sino por todos los equipos. Sobre posibles jugadores que pueden venir, es una decisión individual. No soy yo quién para decir nada”, repitió serio. Sereno. Sabedor de que nadie le colaría un gol con las preguntas. Hoy no.
Feliz de ser "pepinero"
Lunin ha hablado en ruso. Con traductor. Aunque sus primeras palabras han sido en un castellano más que decente. Lo entiende y lo chapurrea. Pero para batirse en sala de prensa, mejor usar su lengua natal. En la otra, en español, ha dado las gracias al Real Madrid y al Leganés por “esta oportunidad. Vengo a trabajar y esforzarme al máximo. Estoy contento de ser pepinero esta temporada. ¡Aupa Leganés!”, se animó a vitorear.
El acento del grito de guerra blanquiazul en boca de su último fichaje ha sacado una sonrisa a Txema Indias. El director deportivo del Leganés lo ha escoltado. Sólo ha hablado en el arranque. Intervención corta, pero de calado con un destinatario cargado de gratitud: el Real Madrid.
“Han puesto en nuestras manos dos de sus perlas, como Óscar y Lunin. Trataremos de ayudarles como ellos nos han ayudado. Estamos orgullosos de tener un portero como Andriy con nosotros, que incluso ha jugado en Europa League. A la afición parece incluso que le hace más ilusión por venir del Real Madrid. Se había rumoreado que las relaciones no son buenas. No es así”, zanjó Indias junto al portador del dorsal 29 del Lega.
“Lo del 99 no es importante”
Lunin quiso en verdad jugar con el 99, pero LaLiga lo ha impedido. Su normativa no lo permite. “No es importante. El 29 también me gusta. Lo más importante es trabajar”, insistió el ucraniano, generoso en los piropos hacia su nuevo equipo.
“En el mes y medio que he estado de pretemporada en el Real Madrid ha sido suficiente para entender que la oportunidad del Leganés es buena. Aquí hay también competencia. Es un club ambicioso”, comenzó a explicar.
“Confío mucho en mi agente y me dijo que esta era la mejor alternativa a día de hoy. Es verdad que en pretemporada traté de mostrar lo mejor de mí, pero sin pensar en las oportunidades que puedo tener en el futuro. Sólo en el presente”, repitió como un mantra antes de enfundarse la indumentaria y salir al césped donde ha sido recibido por un nutrido grupo de hinchas pepineros. Felices. Eufóricos.
