Girona, la pesadilla de Marcelo
El lateral también fue sustituido la pasada temporada en Montilivi. Intocable con Zidane, Lopetegui ya ha demostrado que no le tiembla el pulso.
Marcelo fue el primer cambio de Julen Lopetegui en el partido del Real Madrid en Montilivi. El lateral no estuvo ni mucho menos a su nivel, concediendo demasiado atrás y con poca aportación en el fútbol ofensivo. Aún así, no entendió que el técnico lo sustituyese y así lo manifestó tras el encuentro en zona mixta.
"Me ha sorprendido el cambio pero respeto la decisión del míster; yo quería seguir porque me encuentro bien, al 100%. Entender el cambio no lo entiendo pero lo respeto, es una decisión el míster; yo quiero jugar siempre", declaró.
Y es que Marcelo, estadísticamente hablando, no está precisamente acostumbrado a ser sustituido. Menos aún con Zinedine Zidane, para el que era un auténtico intocable. Curiosamente, se podría decir que solo fue sustituido una vez por decisión técnica en toda la temporada: también en Montilivi.
El Real Madrid naufragó en el campo del Girona (2-1 en contra) y el brasileño fue uno de los principales señalados. Falló en el primer gol de los locales y Machín ordenó a sus hombres entrar una y otra vez por el costado derecho. Un desastre.
Zidane, visto lo visto, decidió sustituirle en el minuto 66 de encuentro. Con 2-1 abajo, el técnico francés introdujo a Lucas Vázquez por él. Por zona mixta ni pasó. Tampoco parece que se enfadara con el míster. Sí con Modric, al que le contestó en caliente durante el choque: "Dices que he fallado... ¿Y tú no fallas?".
Dos días después tuvo oportunidad de comparecer en la previa de un partido de Champions ante el Tottenham. En esta ocasión, Marcelo, más que cuestionar la decisión del entrenador, hizo autocrítica por la imagen mostrada por el equipo. Curioso.
Además del día de Montilivi, Marcelo solo fue sustituido en cuatro partidos en toda la temporada de los 44 que disputó. En dos de ellos fue por lesión (los dos del Betis), en otro por regresar de lesión (Getafe) y el último por el más que favorable marcador ante el Apoel (0-6). Un indiscutible, con todas las letras.
A ello hay que sumarle que se perdió diez partidos en Liga: cinco por lesión, uno por sanción, dos por descanso previo/post Champions y otros dos por rotaciones masivas. No jugó la Copa, que fue protagonizada por los habituales. En Champions, Mundialito, Supercopa de España y Supercopa de Europa; siempre presente. Quizás al '12' le extrañó su cambio en Girona, quizás simplemente no estaba acostumbrado.
