Remiro considera que el club no le está valorando
El Athletic le ofrecería en cinco años lo mismo que a Kepa en uno, lo que no contenta al joven portero navarro. La situación sigue enquistada a la espera de un desbloqueo.
En la matinal del martes Álex Remiro se entrenó con normalidad en las instalaciones de Lezama. Hizo portería con palomitas incluidas. Una estampa muy diferente a la de horas antes orillado en la grada de San Mamés ante el Leganés, en el palco destinado a los jugadores descartados. Hasta ocho, con los lesionados Herrerín e Iñigo Martínez, diez. Remiro, su agente y su entorno consideran que el Athletic no le valora lo suficiente, que no se apuesta por sus prestaciones y que lo que le ofertan por un contrato de larga duración de cinco años solo igualaría a lo que iba a recibir Kepa en una sola temporada.
En la trastienda, una renovación enquistada desde que el mes de noviembre, estando Remiro cedido en el Huesca, le deslizasen una oferta que consideró muy por debajo de lo aceptable. Desde entonces, con ascenso del club oscense incluido, buenas actuaciones del arquero de Cascante, la fuga de Kepa Arrizabalaga, ningún otro ofrecimiento hasta la lesión de Iago Herrerín. En este punto el Athletic le mejoró esa oferta, pero el portero la considera insuficiente. Desde el club se entiende que los números que le ponen encima de la mesa responden con creces a su status actual.
El pasado jueves fue llamado al despacho en Lezama y se le comunicó la decisión del club respecto a su suplencia en caso de persistir su negativa. “La propuesta está muy lejos de un portero que puede ser el del futuro del Athletic”, insisten desde su círculo más próximo. “No creen en él, no interesa lo suficiente y se le quiere esclavizar en Bilbao. ¿A qué precio tiene que renovar?”, apuntan del lado del meta, en una negociación estancada y ahora amenazada de romperse de manera definitiva con Remiro en galeras y Unai Simón de titular repescado de la cesión del Elche.
Berizzo soltó una frase contundente: “Los intereses del club están por encima y siempre pienso en el interés del equipo”. Y para rematar, recado para navegantes: “El club ha aprendido del pasado y no quiere que se repita”. La herencia de Kepa persigue a Remiro ahora. No obstante, aunque las partes se han distanciado y el efecto ha sido el contrario del deseado, se está abierto a reconducirlo.
En enero, a la vuelta de la esquina, de persistir esta situación, Remiro podrá comprometerse por cualquier otro club. La Real Sociedad estaría alerta, aunque no hay nada reseñable. Sí que Espanyol, Huesca, Girona y Cádiz se interesaron para una posible cesión.
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