SUPERCOPA ESPAÑA | SEVILLA 1-BARCELONA 2
1x1 del Barça: Dembélé y Ter Stegen elevan a Messi a Leyenda
Messi dio un gran recital de juego, pero fueron Dembélé y Ter Stegen quienes con sus acertadas acciones acabaron dando el título a un Barcelona.
Así fue la actuación de los jugadores del Barcelona en la final de la Supercopa.
Ter Stegen: El portero alemán regresó en modo ‘on’. No solo por detener un penalti a Ben Yedder sino porque estuvo siempre muy serio bajo los palos. Tuvo un poco de fortuna en un remate a la cruceta de Mudo Vázquez y en el gol de Sarabia pudo hacer más bien poca cosa. Un partido para dejar bien claro quién es el titular desde el primer minuto.
Semedo: Buen partido del portugués que fue titular por la sanción de Sergi Roberto. El defensa exhibió de nuevo como mejor arma su velocidad, tanto a la hora de defender como de subir por la banda. Interesante aportación ofensiva la suya, con centros medidos dentro del área.
Piqué: Lección magistral del central, que tuvo que multiplicarse atrás ante la inoperancia de Lenglet. Además marcó el gol que supuso el empate tras aprovechar un remate de falta de Messi que no pudo despejar del todo el portero del Sevilla.
Lenglet: Mal debut del central francés. Un partido con más sombras de luces. El gol de Sarabia es en buena parte culpa suya al romper el fuera de juego. Se le vio desubicado y desconcertado en más de una ocasión. Lento y sin capacidad de anticipación. Está claro que el proceso de aprendizaje está aún en su primera fase.
Alba: El internacional español demostró que eso de pretemporadas y descansos no va con él. Palizón físico el que se dio en el campo, con el inconveniente de que no estuvo muy fino en sus centros y en sus combinaciones con Messi. Tuvo un pequeño ‘pero’ en el gol de Sarabia ya que llega de un mal despeje suyo de cabeza. Aun así, partido más que notable del canterano.
Sergio Busquets: Le faltó fluidez en más de una acción y tuvo momentos de cierta espesura a la hora de combinar en el mediocampo, pero Busquets es siempre la mejor referencia en el mediocampo y un bote salvavidas para sus compañeros cuando no saben qué hacer con el balón.
Rafinha: Partido muy discreto del brasileño. Jugó como interior derecho, pero en ningún momento se le vio cómodo en el campo. Si quería reivindicarse con este partido lo cierto es que el tiro le salió más bien por la culata. Mejor defendiendo que atacando. Con eso está todo dicho. Fue el primer sacrificado por Valverde.
Arthur: No se le puede echar nada en cara, quizás que le faltara un poco más de atrevimiento en sus acciones. Jugó de interior izquierdo, pero fue reculando extrañamente su posición hasta casi jugar al lado de Busquets. Está claro que le faltan automatismos, pero también que sabe a qué juega el Barça. Eso siempre es importante.
Messi: Espectacular. Ni más ni menos. No marcó, si bien estuvo cerca en dos ocasiones de batir la puerta del Sevilla. El primero al rematar una falta al poste que al final acabó en gol de Piqué y en un remate a bocajarro que detuvo con los pies aún no sabe cómo el meta del Sevilla. Impresionante su gestión a la hora de repartir juego y ofrecer salidas de balón al resto de sus compañeros. Levantó su título 33, convirtiéndose en el jugador del Barcelona más laureado de la historia. Ahí es nada.
Suárez: Especialmente torpe y fallón. Su capacidad de sacrificio es innegociable, pero al charrúa se la ha de exigir más cosas que morir en el campo. No dio una a derechas a la hora de intentar el juego combinativo y con el punto de mira totalmente desviado de cara a puerta. Uno de esos partidos que solo el resultado empaña su mal juego.
Dembélé: El francés de sacó de la manga un trallazo que a la postre acabó dando un título. Puede que su juego a veces parezca un tanto deslavazado, pero su verticalidad y velocidad son siempre una garantía. En muchas fases del partido fue el jugador más incisivo y el que intentaba más los desbordes. Le ha dado motivos más que suficientes a Valverde para que siga apostando con él.
Sustituciones:
Rakitic: El croata salió nada más empezar la segunda parte para dar más equilibrio y consistencia al mediocampo. Y lo cierto es que el equipo se mostró más sólido con Ivan en el campo. Bien a la hora de cortar las transiciones y mejor cuando tuvo que buscar la mejor solución con el balón en los pies.
Coutinho: Salió al campo sustituyendo a Arthur. Una decisión tan arriesgada como acertada por parte de Valverde, que sacrificó el equilibrio defensivo en el mediocampo para aportar más creatividad ofensiva. Tras una primera fase un tanto dispersa, el brasileño empezó a conectar con sus compañeros y así todo fue mucho más fácil.
Arturo Vidal: Salió en los últimos minutos sustituyendo a un ovacionado Dembélé. Su aportación fue testimonial. Valverde le puso de interior derecho, pegado casi a Sergio Busquets.
