El Huesca, pendiente de los descartes de Berizzo
Rico y Remiro son dos jugadores que recibiría. El centrocampista y el portero verían con buenos ojos su regreso a Huesca si Berizzo no cuenta con ellos.
La Sociedad Deportiva Huesca está muy atenta a la pretemporada del Athletic de Bilbao, no solo porque se enfrenten en la segunda jornada liguera, sino que los intereses pasan por pescar entre los jugadores que le sobren a Berizzo. La dirección deportiva del Huesca quiere un portero y un medio y si el equipo vasco aceptase, los elegidos serían Álex Remiro y Mikel Rico.
Los dos futbolistas del Athletic tienen pasado en el equipo altoaragonés, más lejano el del mediocentro, que estuvo hace nueve temporadas, y más reciente en el caso del guardameta, que fue uno de los artífices del ascenso de la pasada campaña. Tanto Remiro como Mikel Rico estarían dispuestos a volver a Huesca siempre y cuando Berizzo les abriera las puertas y Leo Franco recibiría a los dos jugadores con los brazos abiertos.
El Huesca y el Athletic de Bilbao tienen en estos momentos muy buenas relaciones y fruto de ese entendiemiento ha llegado este curso cedido Xabier Etxeita. Sin embargo, las llegadas de Rico y Remiro parecen diferentes. El portero navarro acaba contrato y su regreso al Alcoraz parece que depende de la renovación de su contrato. Rico por su lado, amplió su vinculación hasta junio del 2019 el pasado mes de febrero y está pendiente de lo que decida Berizzo tras lo visto durante esta pretemporada. Los oscenses esperan estos dos refuerzos, ya que supondrían un salto de calidad en una plantilla a la que se unirán también dos extremos como guinda al proyecto que se estrenará en Primera.
Chimy, Cucho y Gallar entre algodones
La dura pretemporada del Huesca tiene a sus primeros damnificados: Chimy, Cucho y Gallar. Los tres jugadores ofensivos no se ejercitaron en la última sesión de trabajo. El cuerpo técnico oscense ha preparado un primer mes de entrenamientos muy físicos y el argentino, el colombiano y el catalán han tenido que frenar tras el desgaste de las primeras semanas de trabajo. Los oscenses jugarán este próximo sábado su quinto partido amistoso en Tudela ante el Eibar.