Los penaltis le dan el Villa de Laguardia al Logroñés

Empate y derrota en los penaltis es el balance para el Deportivo Alavés en su segundo amistoso del verano. Un partido donde se sigue notando la carga física que lleva el equipo, donde la falta de efectivos en la medular es evidente y que deja pocas conclusiones pero algún detalle. Al final, derrota por 1-3 en penaltis.

Debutó Borja Bastón. Sin acierto en sus primeros 45 minutos de albiazul, gozando de varias ocasiones y tampoco atinado desde el punto de penalti. Pero por encima de todo, queda patente que al Alavés le falta un organizador. Manu García cumple perfectamente su rol, pero Wakaso y Daniel Torres son del mismo perfil. En los dos primeros partidos, el juego de ataque albiazul se basa en la profundidad por bandas.

Al igual que el miércoles, Abelardo volvió a apostar por dos onces distintos en cada parte. En la primera, Diéguez volvió a ser el improvisado lateral izquierdo, Laguardia el lider de la defensa y Demirovic la referencia en ataque. El mejor fue Paulino, encarando e intentándolo sin cesar partidndo desde la banda derecha.

Empezó mejor la U.D. Logroñés y se adelantó pronto en una acción donde Diéguez fue superado por su par. Pero el Alavés empezó a ganar en posesión y mereció el empate con varias ocasiones de mérito. No llegaría hasta el segundo acto, en un gol de Bella factura firmado por Burgui, aunque después falló el último penalti en un intento de Panenka. Los riojanos se quedan el trofeo.