Szymanowski: "Un psicólogo a veces no me habría venido mal"
El nuevo capitán pelea por su futuro mientras reflexiona sobre el presente inmediato: "Si alguno quiere salir, la puerta está abierta, pero en el Leganés están todos contentos".
El Leganés ya trabaja en su pretemporada. Cada mañana, 27 hombres de Pellegrino salen al césped a primera hora. Siempre falta uno. Alexander Szymanowski también trabaja, pero lo hace en la intimidad del gimnasio. Una cueva que riega de sudor pese a que el aire acondicionado esté a tope. El nuevo capitán del Leganés no ahorra en esfuerzos para cumplir un sueño ahora complejo que hace apenas siete meses resultaba sencillo: jugar.
En diciembre cayó víctima de un problema muscular en los isquios que se complicó con otra dolencia en los aductores. Tuvo que pasar por quirófano. Al salir, dos recuperaciones le esperaban. Una, física. La otra, anímica. Porque el nuevo capitán del Leganés no tiene ni idea de cuándo volverá a competir. “No hay fechas. No se sabe”, insiste. Su nueva batalla se llama día a día. En ella también pelean los suyos, con los que paga sus altibajos. Un ejército leal que no le falla y en el que incluso ha pensado en reclutar ayuda psicológica. “Algún día que otro no me habría venido mal”, revela en la intimidad del gimnasio, de esa cueva a la que abre las puertas en exclusiva a AS.
Directo y vertical, como su juego, Szymanowski no elude preguntas. Contesta a todo. Desde el adiós de Garitano hasta el de su amigo Mantovani. Desde los objetivos del club hasta la necesidad de mantener esa esencia de conjunto humilde que precisamente ambos, exentrenador y excapitán, representaban. Ahora le toca a él enseñarla. Divulgarla.
¿Cómo está?
"Bien. Contento. En las últimas semanas hemos tenido avances importantes".
Se le nota ‘fiera’ encerrada, con ganas de salir de esta jaula…
"Yo nunca pensé que sería tanto. Después de la cirugía extrañas jugar. Es una buena prueba de psicología. Y la estoy superando".
Desde diciembre sin competir....
"Más de seis meses y lo que queda. Es mucho. Pero la experiencia me ha hecho ser fuerte. Aprender que esto es parte del fútbol. En estos momentos es cuando uno se hace futbolista. No jugando o marcando goles".
¿Cuándo volverá?
"No hay fechas. No se sabe. Lo importante es volver sano. Sé que cuando vuelva, se me exigirá como a uno más. Así que mejor estar a tope".
¿Peligra el arranque de temporada?
"No lo sé. No pienso en eso. Pienso en mejorar a diario".
Cuántos momentos duros se habrá tragado…
"Son momentos que sólo conocen mi familia y los que están detrás de mí: cuerpo médico, fisios… ellos aguantan mis malos días. Ellos sufren con esas malas noticias y mi estado de ánimo. Lo pago con ellos".
¿Es mucho de cabrearse?
"Sí, sí…conmigo, con ellos... Tiene mucho mérito soportarme. Sobre todo, Sergio Hontoria [uno de los fisios del Leganés]. Siempre me animó, aunque hubo días que eran de auténticos vendavales".
¿Ha necesitado un psicólogo?
"Cuando pasas mucho tiempo con tu familia y amigos, entras en una especie de depresión futbolística por no jugar. No sabes cuándo volverás. Mi gente me ha intentado aislar en el día a día, pero es verdad que es muy difícil. Te metes mucha presión. Es lo más complicado. No he necesitado un psicólogo o algo así, pero es verdad que un día que otro no me habría venido mal."
¿La ansiedad se cura?
"Sí, con tiempo. El día a día. Tengo esa fortaleza. Es mi mayor virtud. Ni los goles, ni mi velocidad... Es mi fortaleza mental. Es lo que me ha traído al Lega. Es lo que me va a hacer salir".
La fortaleza es virtud de capitanes. Ahora le toca ser el del Leganés.
"El año pasado fui el segundo. Me nombró Asier. Este año me encantaría ser capitán del Lega. Está por ver. Mantovani siempre se dirigió a mí como un posible capitán. El club también me trató así. Es un trabajo más allá del partido. Tenga o no brazalete me siento así. Capitán. Pero hay muchos compañeros que se pueden desempeñar con el brazalete".
La capitanía de Mantovani era especial.
"A mí me sorprendió Martín como capitán. Me enseñó que para ser capitán no hace falta demostrar autoridad. Con normalidad, muy filosofía Leganés, así se consigue. Me llamó la atención bromear con él, vacilarlo. Martín parecía a veces un niño. Así se ha ganado a la gente".
¿Echa de menos a Mantovani?
"Es complicado imaginarse un Leganés sin Mantovani".
Usted pidió que renovará.
"Fue una opinión futbolística. Al Leganés le convenía que siguiera. Pero el club decidió que se separaran los caminos. Es algo 100% respetable. Ahora está en otro club y será feliz. Ya tendremos tiempo de añorarlo. Yo y todo el Leganés. Se me va un apoyo importante en este club. Pero habrá vida después de Martín".
Y después de Garitano.
"Vamos a hacer todo lo posible para que Mauricio tenga igual o más éxitos que Asier. Asier ya sabemos qué ha hecho por el club. Le toca un proyecto nuevo. Que le vaya bien. Ahora intentaremos ganarle cuando juguemos contra él".
El Leganés nunca pisó puestos de descenso. ¿Estará preparado cuando lo haga?
"El primer año no estuvimos al descenso, pero le pegamos al palo. Hay que aprender a disfrutar sufriendo. El sufrimiento de Primera es maravilloso. Si este año se tiene que dar un sufrimiento así, bienvenido sea. Es bonito".
Curiosa reflexión…
"Es que la gente se implica más cuando se está luchando, por ejemplo, por una permanencia que estar, como este año, en zona de nadie".
Dice Pellegrino que no impone al Leganés sólo el objetivo de la permanencia.
"El objetivo lo decide el presupuesto del club. Si dices que quieres ir a Europa, pero tienes uno de los presupuestos más bajos, el objetivo no es Europa, es la permanencia. Veremos qué esfuerzo y qué inversión hace el club. Mi objetivo es que el equipo esté arriba y luche por cosas que no habíamos visto antes. En Liga me gustaría luchar hasta el final de temporada por algo que pueda ser luchar por Europa".
¿Se siente con la responsabilidad de enseñar a los nuevos qué es el Leganés?
"Sí, totalmente. Me identifico con las señas de identidad del Leganés. Tengo esa responsabilidad. De contar a los nuevos que se involucren con el proyecto".
Ha habido nervios por la falta de fichajes.
"El aficionado es así. Cuando las cosas no van rápidas te presiona. Eso le viene bien al club. Tienen que pincharnos. Estar ahí para que no nos relajemos. Lo entiendo, aunque les transmito tranquilidad".
Decía Mantovani que importante era fichar, pero también cuidar a los que están.
"Koke dice que en los clubes deben quedarse los que quieran quedarse. Me siento identificado. El que quiera quedarse es porque esté a gusto. Gente que lleva mucho tiempo, creo que la mayoría está contenta. Si alguno, por lo que sea, no ha encontrado en el Leganés el club de sus amores, tiene la puerta abierta para irse. Pero aquí están todos contentos".
La salida de Guerrero fue rara.
"Fue cosa normal. Las negociaciones o acaban bien, o acaban mal. Guerrero ha optado por irse. Sé que estaban cerca del acuerdo, pero hay que entenderlo. Decidió irse a Olympiacos y ya está. Normalidad".
¿Habló con él?
"Sí, le transmití el deseo de que siguiera aquí. Pero si eligió lo que eligió, le deseo suerte".