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ESPANYOL

Fallece Vall, perico y compañero de Kubala y Di Stéfano

Se formó en el Barcelona y llegó a jugar con el primer equipo, jugó tres años en el Espanyol y fue el artífice del primer ascenso del Levante a la máxima categoría.

Fallece Vall, perico y compañero de Kubala y Di Stéfano

Delicado de salud, en noviembre de 2016 José María Vall (Barcelona, 14-08-1939) asistía a un encuentro de los Perico Players en Badalona. Ya no aguantaba un partido entero: “Deberían prohibir pasársela al portero y poner una norma para que, cuando pases de mediocampo, no vuelvas atrás. Son insoportables los partidos”. Lo suyo siempre fue estar cerca del área y golear, con la camiseta del Espanyol y sobre todo de su Levante, donde en 2017 recibió un homenaje sobre el césped del Ciutat de València. Vall falleció la madrugada del sábado al domingo después de una larga enfermedad.

Vall empezó su carrera en el Barcelona, en el equipo juvenil. Un prometedor goleador que llegó a ser campeón de Europa con la selección española juvenil. Dio el salto al Condal y, pese a jugar varios partidos con el Barcelona de Ladislao Kubala, finalmente se fue al Levante, donde empezó a hacer carrera. Jugó allí cuatro temporadas, del 60 al 64, en las que consiguió después de varios intentos el ascenso a Primera. Sus goles fueron determinantes (jugó 99 partidos y anotó 24 goles) para que el conjunto valenciano hiciera historia y ascendiera por primera vez: el catalán anotó el tanto del ascenso en el minuto 83 del partido de vuelta de la promoción ante el Deprotivo de la Coruña.

En la campaña 1964-65 lo fichó el Espanyol, donde empezó a tejer lazos de amistad con jugadores de la plantilla que ha mantenido hasta sus últimos días. En aquella temporada, el equipo entrenado por Kubala tenía como principales goleadores a Alfredo di Stéfano y a Vall, autores de siete y cinco goles respectivamente.

En el conjunto blanquiazul no acabó de cuajar, eclipsado también por los posteriores Cinco Delfines. Participó luego en las campañas 68-69 y 69-70. Entre medio estuvo tres años en Sabadell. Hombre de carácter fuerte, en el Espanyol finalmente jugó 71 partidos y marcó diez goles. Vivió un descenso y el posterior ascenso. Entre Primera y Segunda disputó 300 encuentros y anotó 73 goles. Siempre contaba que su carrera estaba predestinada a jugar en clubes que peleaban por Ligas, pero que no se dieron los condicionantes.

Los restos de Vall estarán en el tanatorio Sancho de Ávila desde este lunes a partir de las 16:00 hasta las 21:00. El sepelio será el martes a las 13:15.