Mina, oportunidad de mercado
El gran Mundial del central del Barcelona hace que el club vea con optimismo la posibilidad de hacer negocio con el colombiano.
Yerry Mina está siendo uno de los héroes inesperados del Mundial de Rusia. El central colombiano del Barcelona lleva anotados dos goles, el último le valió a Colombia el pase a los octavos de final, y ante Senegal fue elegido como MVP del partido. Una actuación que desde el Barcelona se observa con satisfacción, más con una visión de mercado que deportiva.
Y es que difícilmente va a cambiar el estátus de Mina en la plantilla del Barcelona. El central no entra en los planes de Ernesto Valverde, que desde que llegó a Barcelona apenas ha contado con él. El Barça sigue adelante con su plan, que no es otro que asentar la defensa fichando a un central para que se complemente y haga la competencia a Piqué y Umtiti, mientras que se sigue confiando en Vermaelen como cuarto central.
En esa ecuación sigue quedando fuera Mina a pesar de su estupendo paso por Rusia. Unas actuaciones que en el Barcelona valoran desde el punto de vista monetario. Dan por hecho en las oficinas que a Mina no le van a faltar ofertas este verano, ya sea para ser cedido o para ser traspasado.
En este sentido, las portadas de la prensa deportiva de Barcelona son elocuentes y no dejan lugar a dudas. Sport abria su edición con una gran foto del central y el titular “Héroe Mina” mientras que el colombiano también acapara la tapa de Mundo Deportivo con el titular “Mina de Oro”.
Ambos diarios coinciden en señalar que con sus dos partidazos Mina se ha revalorizado en el mercado y que podría aportar una venta millonaria.
De momento, la intención del joven jugador (23 años) que llegó en enero del Palmeiras brasileño es la de seguir en el Barça, aunque no parece que lo vaya a lograr.
El Fenerbahce es el primer equipo que se ha interesado seriamente por él proponiendo una cesión, pero en la secretaría técnica no quieren precipitarse porque saben que tras la experiencia de Rusia, Mina ha ampliado el mercado y ha convertido el Mundial en un perfecto escaparate.