Marcelo calma a Neymar y toma las riendas de Brasil
Las imágenes de TV Globo muestran al lateral del Madrid ordenándole a Neymar que dejara de llorar y asumiendo el papel del líder que Brasil tanto buscaba.
Tras el partido ante Costa Rica, esta figura parece estar surgiendo. Y se llama Marcelo.
Las imágenes del postpartido de la TV Globo muestran al lateral del Real Madrid acercándose serio y concentrado a Neymar, que lloraba de rodillas en el medio del campo, rodeado del resto de sus compañeros. Y con voz de autoridad, ordena que se acabe la conmoción y que se marchen al vestuario.
“¡Ney! ¡Levántate! ¡Vámonos de aquí! ¡El resto también! ¡Vámonos! ¡Para ya, carajo!”, ordenaba el lateral en voz alta a Neymar y al resto de sus compañeros, que enseguida le obedecieron y pasaron a seguirle al vestuario.
Cuando vio que Neymar seguía llorando mientras caminaba y era abrazado por otros jugadores, Marcelo volvió a enfadarse y repitió sus palabras.
“¡Eh! ¡Vámonos! ¡Ya está! ¡Ya está! ¡Vámonos de aquí! ¡Hasta el final!, gritó el lateral del Real Madrid.
Antes Marcelo había sido el que se preocupó de acompañar a Neymar hasta el vestuario al final de la primera parte, prediciendo que el delantero estaría a punto de cometer el error de confrontar el árbitro. El jugador del Madrid y gran amigo de Ney, le siguió durante todo el trayecto hablándole e intentando calmarlo. Hasta que el delantero se desenredó de su compañero y fue a por el árbitro en el túnel de vestuario. Momento en que Marcelo saltó sin dudar para agarrarle y empujarle en la dirección del vestidor brasileño.
El liderato de Marcelo es algo reconocido no sólo en el ambiente de la selección brasileña sino que también en el Real Madrid. El lateral es el segundo capitán blanco, detrás apenas de Sergio Ramos y por delante de Cristiano Ronaldo y es un referente como una de las caras del club en público.
En la selección nunca pudo asumir este papel por sus problemas personales con Dunga, por la insistencia de Scolari en darle la capitanía a Thiago Silva, un líder más comedido y calmado, y por la presencia de un veterano como Dani Alves en el vestuario.
Pero ante la falta de esta figura de líder y el cada vez más preocupante descontrol emocional de la selección brasileña y de su principal estrella, Marcelo ha dado un paso adelante y tomado las riendas. Fue el capitán del debut ante Suiza. Y, aunque no lo vuelva a ser oficialmente, todo apunta que será el gran líder que Brasil tanto buscaba en lo que queda de competición.