Una treintena de personalidades pericas, que van desde Claudio Biern a Joan Golobart, pasando por Fernando Martorell, Sergio Oliveró, Josep Maria Piera, Jeroni Castell, Ferran Marín y Arnau Baqué, han remitido una carta abierta al presidente del Espanyol, Chen Yansheng, para prevenirle de los riesgos que está corriendo el Espanyol por su desconexión entre directiva y aficionados, y para ofrecerle una suerte de solución.
Encabezada por un agradecimiento hacia su apuesta por el club (“lo salvó de una posible desaparición”), su inversión y su estilo “riguroso” de gestión, la carta empieza reflexionando sobre la “temporada fallida” que se deriva de la baja asistencia a Cornellà, además de los ceses de entrenador y director deportivo. “Hemos acabado en una posición claramente alejada de la que nos corresponde por historia y presupuesto”, afirman. Aún más les preocupa “la pérdida de conexión de la entidad con su gente, así como la cada vez más grande falta de presencia en ámbitos públicos y sociales”. Y lamentan que Chen delegue en personas con altas capacidades profesionales pero “mayoritariamente ajenas a la historia y sentimiento que genera nuestra entidad”. Por eso, lanzan una sentencia: “Si no se respetan los orígenes, se acaba perdiendo la identidad”.
Por tanto, piden al presidente que “considere incorporar al club, ya sea en su Consejo de Administración o en algún órgano asesor, a españolistas de corazón y probada experiencia en sus ámbitos profesionales”. Se refieren a personas desligadas del pasado que llevó a Chen a “rescatar” al Espanyol, y con capacidades para “representar públicamente al Espanyol, ya sea por su implicación en organismos deportivos, públicos como en las peñas, la afición y con los medios de comunicación. En definitiva, concluyen, “considere usted incorporar a personas que puedan apoyar al club en todos los ámbitos en que sea necesario recuperar los valores que se están perdiendo”.
Finalmente, los firmantes se ponen a disposición de Chen para aclararle o ampliarle el contenido de la carta. De hecho, el presidente del Espanyol tiene previsto aterrizar en Barcelona este domingo, horas antes del partido contra el Málaga, por lo que este encuentro sería posible en breve siempre y cuando él lo aceptara.
