Sergio ensaya con Moyano como pareja de Kiko en la zaga
La sanción de Calero y la lesión de Deivid obligan a buscar soluciones. El capitán muestra su polivalencia, ya que este año ha actuado en todas las posiciones de la zaga
Sergio González, entrenador del Real Valladolid, tiene un problema que solucionar esta semana, ya que la sanción de Calero y la lesión de Deivid le obliga a buscar pareja de baile para Kiko Olivas. Una de las opciones que se podría barajar es retrasar la posición de Luismi, pero el andaluz se lesionó en el tobillo en el partido ante el Cádiz y parece que no estará disponible para este partido, ya que lleva sin entrenarse toda la semana.
Con estas premisas la solución que está preparando el técnico es utilizar a Moyano en el centro de la zaga, cuestión que ha ensayado en la jornada de ayer en diversos ejercicios dentro del entrenamiento matinal. Esta modificación implica la vuelta al equipo de Antoñito, así que la defensa estaría compuesta por el sevillano en el lateral derecho, Moyano y Kiko Olivas por el centro y Nacho por la izquierda.
Llama la atención que un jugador como Lucas Rotpuller, central específico fichado en el mercado invernal tras la lesión de Deivid, no tenga apenas opciones en una situación de máxima necesidad, pero la falta de ritmo hacen que sea un complemento en los entrenamientos más que una opción real de juego.
Moyano ha mostrado su polivalencia esta campaña, ya que ha jugado tanto en su banda natural, la derecha, como en la izquierda y en algún partido también actuó en el centro de la zaga, como más que posiblemente haga ante el Albacete.
Míchel designado como el mejor del mes
Míchel ha sido reconocido por los aficionados el mejor de abril y logra este premio por segunda vez consecutiva. El centrocampista dijo que la llegada de Sergio “ha sido buena para el equipo” y que se encuentra cómodo jugando en el doble pivote. Además recordó que “el Albacete es el equipo más correoso de la categoría y no lo pondrá fácil” y que no hace cuentas pero que “ya todo son finales y no podemos fallar”. Míchel tiene cuatro amarillas y tendrá que medir sus acciones en los próximos partidos para no ser sancionado
