Gerard Moreno, el cambio de discurso que sugiere un adiós
Del “me veo muchos años aquí” ha pasado al “veremos qué pasa en el mercado”. La dialéctica ha variado conforme lo hacía el proyecto del Espanyol, sin ambición.
En los últimos días se ha abierto de par en par una puerta que antes se había cerrado incluso con candado: la de la salida de Gerard Moreno del Espanyol. La necesidad del club de ingresar 17’2 millones en ventas y la falta de un proyecto ambicioso que ofrecer a un futbolista de enorme proyección pueden precipitar el adiós. Y las propias declaraciones del canterano sugieren ese triste final.
“Veremos qué pasa cuando se abra el mercado, estoy centrado en el equipo, queda mucho”, contestó Gerard el pasado sábado cuando se le preguntó por su futuro. Y añadió: “Hay más partes que deben hablar y no creo que tenga que responder a esto. Lo prioritario es quedar lo más arriba posible porque beneficia a los ingresos de la entidad”. Un cambio de discurso absoluto respecto a lo que comentó cuando, hace solo cuatro meses, se le formulaba la misma cuestión: “Todo el mundo sabe lo contento que estoy aquí, que esta es mi casa”, aseguraba el 4 de enero, tras la enésima intentona del Villarreal por recuperarlo; aquel día, marcó y se señaló el escudo.
Más contundente aún se había mostrado el 10 de noviembre, durante la puesta de largo de su renovación: “Claro que me gustaría retirarme aquí, aunque soy joven”, destacó, y apuntó que “es un sueño lograr un título o ir a competición europea”. Esto último podría ser una señal clara para explicar su cambio.
Sus palabras fueron igualmente categóricas el 10 de octubre: “Me veo muchos años aquí porque soy feliz, es mi casa”. Y, también, el 4 de agosto, cuando se especulaba con otra oferta del Villarreal: “No sé nada, pero seguiría tranquilo si hubiera ofertas porque aquí estoy contento”.
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