Las Palmas, con calma para renovar a Chichizola
Se avecina una profunda renovación que empezará a precipitarse una vez se consume el descenso. La renovación del argentino, aunque con calma, es prioritaria.
Con la Segunda División a la vuelta de la esquina, sin más aliciente que adivinar la jornada en la que se certificará el descenso de manera matemática, no le queda más opción a Las Palmas que empezar a sentar las bases del nuevo proyecto deportivo en la categoría de plata. Entre cesiones, sueldos insostenibles, finales de contrato y posibles traspasos, se avecina una limpia importante en la primera plantilla amarilla, afanándose en las oficinas del EGC en mantener a determinados activos del club para luchar por el ascenso.
Así, una de las prioridades es la renovación de Leandro Chichizola, portero argentino que llegó el verano pasado procedente del fútbol italiano (Spezia, Serie B) tras firmar por un curso. Después de unos meses irregulares, desde el aterrizaje de Paco Jémez nadie discute su titularidad, Las Palmas ve en él a un portero de futuro, y espera acontecimientos para renovarle. "Pero todavía no estamos en ese minuto", advierten desde el club, que todavía se encuentra dentro del plazo para ejecutar esa opción de renovación que se guardó en su primer contrato, que podría ser de tres años.
Chichizola ya estaba en la agenda del club desde su etapa en el River Plate, donde jugó hasta 2014, cuando cruzó el charco para jugar en Italia (Verona y Spezia). Ayuda, además, que tenga pasaporte italiano, con lo que deja libre una vacante de extracomunitario.
Chichizola y Raúl conformarían por segunda temporada consecutiva la pareja de porteros de Las Palmas. Hasta la fecha, el argentino acumula 2.070 minutos en liga, distribuidos en 23 partidos, y 180 en Copa del Rey (2 partidos). Mientras, el canterano firma por el momento 810 minutos ligueros distribuidos en 9 partidos, y calca los números de su compañero en Copa.
Bajas. Con respecto al curso que viene, salvo sorpresa en la portería, Las Palmas concederá bajas en todas las líneas. Así, Nacho Gil volverá al Valencia y Jairo ya había firmado por el Schalke. Gálvez, que todavía conserva buen cartel en Primera, debe regresar al Éibar. Por caché, la continuidad de Calleri parece insostenible, como lo es la de Emenike, cuyo fichaje ha destapado problemas internos en el club tras llegar lesionado.
Salvo sorpresa, la Unión Deportiva tampoco ejercerá la opción de continuidad de Halilovic, tasada en los 5 millones de euros que habría que pagarle al Hamburgo, y Vicente y Tana gozan de un importante cartel en Primera, lo que podría facilitar su salida.
De todas formas, nadie parece estar del todo a salvo. Se avecina majo y limpio en la primera plantilla amarilla. Le toca resetearse si quiere pelear rápidamente por ascender.
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