Calleja: "En la mala racha aprendí a no fustigarme demasiado"

¿Cómo ve la lucha por las plazas europeas?
Apretada. Muchos equipos para pocos puestos. Hasta la última jornada, complicada.

¿Quién ve más peligroso?
Los más peligrosos somos nosotros. El peligro pasa por no ser nosotros mismos, ya que dependemos de lo que hagamos y no de lo que hagan los demás. Si hacemos las cosas como sabemos estaremos ahí. El Sevilla es el más fuerte y los que vienen atrás lo hacen con ilusión.

¿Han pasado ya lo malo?
Espero y eso quiero creer. La verdad es que a pesar de los momentos malos no hemos perdido esas plazas europeas. La clave es no obsesionarnos, debemos mirar partido a partido.

La Primera es bonita, pero cuando se pone torcida...
Cuando se pone mal, es dura. La diferencia es la tensión de los resultados, es otra historia. En Primera todo se magnifica, y es complicado que la gente mantenga los pies en el suelo cuando viene una de esas malas rachas. Por lo que lo importante es no entrar en esa montaña rusa de sensaciones. La clave es mantener la cabeza fría, ya sea si ganas o si pierdes.

Y supongo que de técnico no se parece en nada a cuando uno es jugador...
Son mundos totalmente diferentes. De jugador piensas en ti, en estar bien, no te centras en otras cosas y desconectas. No hay comparación. De entrenador estás mucho más responsabilizado, pendiente de todo y te lo llevas a casa, no desconectas.  Tienes mucha más responsabilidad, debes manejar todo y además lograr los resultados.

¿Cómo lleva ser señalado?
Una de las cosas más complicadas es la de saber que todo lo que pasa es culpa tuya, mientras que de jugador normalmente la culpa suelen tenerla los demás. Cuando llegas al banquillo, sabes que cada uno tiene su responsabilidad y que tu debes manejar todo eso, tener el control para que salga todo bien.

¿Lo ha pasado mal?
La mala racha la he pasado mal, he sufrido y no lo voy a negar. Pero me he dado cuenta que hay aspectos que no dependen de ti. Tengo claro que uno no debe fustigarse demasiado. Hay cosas que no dependen de ti por más que te esfuerces, por lo que obsesionarse no es bueno, incluso te puede dañar la salud. Hay veces que debes saber perder y asimilarlo como tal, aprender de los errores.

En Vila-real se le respeta.
Yo noto que la gente me tiene respeto y aprecio, algo que valoro mucho. Pero entiendo que haya exigencia y ambición, pero a veces creo que hay momentos que es exagerado. El equipo ha tenido problemas, cambios, bajas e inconvenientes, y a pesar de ello hemos sido capaces de solventarlo.

El club parece convencido de que usted es el hombre.
La idea del club es la de tener continuidad, que es algo que me hace estar muy contento y muy responsabilizado. Creo que además es bueno que se crea en una idea y en un proyecto a largo plazo. Si solo piensas en el domingo te empiezas a equivocar. Si no tienes una idea y un proyecto se pierde la esencia y vas dando bandazos.

Pero claro, si no se gana...
El club tiene las ideas muy claras, si están pensando en un proyecto a largo plazo y yo formo parte del mismo es porque han visto algo que les lleva a pensar en ello. Soy consciente de que los resultados mandan y que si no acompañan es porque no se está dando con la tecla, creo que es bueno mirar los resultados, pero hay que tener esa paciencia de apostar por una idea.

¿Y el cambio de sistema?
Una temporada está llena de momentos. Los rivales te estudian, llegan las bajas y los problemas... y debes reinventarte.