Iniesta despierta de nuevo los miedos en el Barça
Como el año pasado, y pese a haber firmado en octubre su renovación de por vida, el capitán abre la puerta a un posible adiós a China. Debe decidir antes del 30 de abril.
Un par de días después de que el pasado 6 de octubre renovase de por vida por el Barcelona (“Iniesta per siempre se leía en la camiseta conmemorativa), la emisora RAC1 desveló que el capitán del Barça debería decidir cada año antes del 30 de abril si continuaba o no. Se trataba de ayudar en parte a la directiva del Barça en la planificación de cada temporada. Pese a que durante los primeros meses de la temporada en el club existía el convencimiento de que la renovación serviría para que Iniesta fuese jugador del Barcelona al menos hasta 2019, el jugador, reflexivo hasta el extremo durante toda su carrera, podría haber ido cambiando de parecer. La fecha no estaba puesta por casualidad. Este miércoles después de ganar al Chelsea volvió a dejar su continuidad en el aire: “Antes del 30 de abril tengo que tomar una decisión y la decisión que sea será la más honesta para el club y para mí. Hay dos opciones: seguir o marcharse”.
Si Iniesta decide marcharse, su destino sería China. El fútbol chino, más controlado en sus inversiones en los últimos tiempos, sueña hace años con tener al mago de Fuentealbilla en su Liga. El año pasado, Iniesta recibió dos propuestas mareantes. Una de ellas alcanzaba los 35 millones de euros limpios por temporada además de otros privilegios como incluso renunciar a jugar partidos fuera de casa. Un contrato a la carta. Su respuesta fue no pero el jugador agradeció las proposiciones y dejó la puerta abierta a una posible experiencia en China.
A pesar de estar a punto de llegar a los 34 años, Iniesta continúa tremendo un peso gigantesco en el peso del Barça, que vuela en las mejores noches de Andrés y sufre cuando no está en su mejor versión como ante el Chelsea. Si Iniesta no está a tope, el Barça sufre porque no tiene ningún jugador con su capacidad para el manejo de los partidos. Valverde dispone de jugadores únicos como Busquets o Rakitic para mantener la posesión con criterio, pero nadie como Iniesta marca los ritmos del partido y, sobre todo, exhibe sabiduría sobre el césped. Ni la renovación de por vida le ha valido al Barça para templar las inquietudes de una de las leyendas más grandes (30 títulos) de la historia del club. El “Iniesta per sempre” está en peligro.